Universidad de Chile no encuentra el rumbo.
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La realidad golpea duro a la Universidad de Chile. Uno de los clubes más importantes del fútbol nacional está a un punto de la zona de descenso y, tal como en la primera parte del año, no para de acumular problemas fuera de la cancha.
Tras una seguidilla de malos resultados y un conflicto abierto con Johnny Herrera, Alfredo Arias dejó de ser el técnico de los estudiantiles cuando el semestre ya había iniciado y lo reemplazó Hernán Caputto, que había llegado hace poco para hacerse cargo del fútbol juvenil. Era el tercer DT en solo un año.
La situación parecía mejorar. El ex entrenador de la Sub 17 debutó con un triunfo clave frente a Antofagasta, pero la paz al interior del club duraría apenas unos días. Barristas organizaron un atentado contra el gerente general de Azul Azul, Felipe de Pablo.
La noche del 20 de agosto el grupo atacó con piedras el domicilio de los padres de De Pablo y le rompieron el auto. Al irse, dejaron una corona fúnebre al interior de la vivienda. Tiempo después se supo que no estaban conformes con el trato que estaban recibiendo por parte de la dirigencia. Fueron detenidos en septiembre.
El equipo, en tanto, se ve desnortado. No pierde, pero acumula empates y lo acecha la sombra del descenso.
Por si eso no fuera poco, sigue perdiendo a jóvenes valores de su cantera. El arquero Gonzalo Collao, sin minutos, ya arregló su desembarco en el Extremadura de España. A él se suman, en el último tiempo, Yerko Leiva, Nazareno Solís, Valber Huerta y Valentín Castellanos, que hoy es figura en la MLS de Estados Unidos y suena en la selección argentina.
"Con Collao, negociamos cerca de un mes y aceptamos casi todo; y después nos informó que se iría a Europa. Me da pena que los jugadores no quieran jugar en la U", declaró el Rodrigo Goldberg. Tanto él como Sergio Vargas fueron apuntados por la salida del golero.
En caso de perder las categoría, el cuadro laico perdería la millonaria cifra que recibe del Canal del Fútbol. El estado financiero de la institución preocupa a la dirigencia. Se han despedido a varios funcionarios del club e incluso se decidió restringir el uso de shampoo para el plantel y el cuerpo técnico. Ante ese escenario, una popular marca de útiles de aseo envío un cargamento al CDA. A José Luis Navarrete, timonel de Azul Azul, no le hizo gracia alguna.
"Fue una falta de respeto de una marca que considera hacer publicidad de manera engañosa con nuestra institución. El camión fue devuelto a su origen. Toda política económica tiene un objetivo que es reducir y replantear las finanzas del club. Estamos encaminados en un plan para llegar a fin de año de una manera más tranquila y no sufriendo sobresaltos económicos", comentó.
Este sábado, Universidad de Chile enfrenta a Palestino en el Estadio Nacional. Necesita un triunfo para darse un respiro. Se viene Colo Colo la próxima semana.
