Más de dos años después, cuando ganó su último título en Dubai en febrero de 2017, el británico Andy Murray (243°) regresará a una final del circuito ATP, en Amberes, tras batir al francés Ugo Humbert (70°). Disputará este domingo contra el suizo Stanislas Wawrinka (18°).
El tenista escocés, otrora número uno del mundo y poseedor de tres títulos del Grand Slam, disfruta en Amberes de su mejor nivel de juego desde su regreso. Lo demuestran también los resultados. En sus últimos torneos Murray ya se acercó a los momentos relevantes, a los tramos finales de los cuadros. Ahora entra de lleno en la puja por el éxito.
Sometido a una seria intervención quirúrgica el pasado mes de enero, cuando se tuvo que implantar una prótesis en su cadera y aventuró una retirada de la actividad profesional,
Murray está de vuelta.
Cada vez ha estado más tiempo en pista y ha respondido con acierto y solvencia a los contratiempos. Remontó ante Humbert (3-6, 7-5 y 6-2) después de extenuantes dos horas y veintitrés minutos de partido.
Murray aspira en Amberes al primer trofeo ATP desde que ganó Dubai en el 2017. Afrontaba contra Humbert sus primeras semifinales desde Roland Garros 2017. Era hasta ahora su mejor papel desde la vuelta a la competición.
El escocés resistió el arranque entusiasta de Humbert, 70 del mundo, y que tenía ante sí la posibilidad de estar en una final. Nunca antes lo había logrado.
Murray tendrá como rival en la pelea por el título al suizo Stanislas Wawrinka, ávido también de agrandar su historial. El helvético, decimoctavo del circuito, superó al italiano Jannik Sinner (119°) por 6-3 y 6-2 en 65 minutos. Un duelo decisivo con pinta de Grand Slam entre dos jugadores de vuelta y necesitados.