Fue una jornada negra.
Chile, dirigido por Nicolás Massú, mostró un deslucido juego en su debut en las finales de la Copa Davis y
cayó de manera inapelable ante Argentina por 3-0.
Cristian Garin, quien venía de llegar a cuartos en el Masters 1000 de París, no pudo continuar con su buen nivel y fue arrollado por Diego Schwartzman, mientras que Nicolás Jarry poco pudo hacer ante Guido Pella y en el dobles el binomio nacional también se inclinó.
Ante estas derrotas, Chile quedó muy complicado en el Grupo C y sus chances para avanzar a los cuartos de final son escasas.
Esto principalmente por la cantidad de países que clasifican a la siguiente fase. En este nuevo formato, de los 18 equipos (divididos en seis grupos de tres) clasifican a cuartos los primeros de cada zona y los dos mejores segundos.
Tras este debut, en el que no se ganaron sets ante Argentina, quedar primero del grupo asoma como una tarea casi imposible para Chile, ya que habría que esperar una serie de combinaciones complejas y con marcadores muy abultados.
De esta forma, Chile aspiraría al segundo puesto del Grupo C. Si es que Argentina le gana este miércoles a Alemania, Chile venciendo a los germanos el jueves se asegura el segundo puesto de la zona.
Sin embargo, pensando ser uno de los dos mejores segundos, a los dirigidos por Massú les juega muy en contra la paliza de este lunes. El 0-6 en sets y el 19-37 en games ganados podría costar muy caro.
Esto porque en el caso de igualdad de series ganadas entre dos países, se definirá al clasificado por sets ganados y después entrarían a contar los juegos obtenidos.
Tarea que asoma como titánica para Chile, que este jueves se medirá ante Alemania a las 07:00 horas de nuestro país.