Fue una jornada tensa. Este viernes estaba marcado por el regreso del fútbol chileno después de la paralización de un mes debido al estallido social, sin embargo,
no se pudo desarrollar con normalidad el inicio de la fecha 26 y le sumó más problemas a la ANFP.
Si bien Cobresal y Unión Española pudieron jugar en El Salvador, con triunfo por 3-2 para los locales, el encuentro entre La Calera e Iquique fue suspendido cuando corría el minuto 66 y con el marcador 0-0, debido a la irrupción de "barras bravas".
Ante esta compleja situación vivida en el Bicentenario de La Florida, todo indica que el resto de la fecha se suspenderá y que la próxima semana habría una reunión para discutir sobre el futuro del Torneo Nacional.
Y, tras esta difícil situación vivida en La Florida, la opción de que se suspenda el campeonato toma fuerza. En el caso de que se tome esta determinación, el partido entre Calera e Iquique podría desatar una polémica.
Esto porque si la ANFP decide dejar las cosas tal como quedaron y con las mismas bases reglamentarias, contabilizando los duelos jugados este viernes, la tabla del Torneo tendría una modificación importante.
Aunque hasta el minuto que se escribió este artículo la ANFP todavía no actualizaba la tabla, Iquique, con el empate, pasaría a sumar 25 puntos y mandaría a la Universidad de Chile a la zona de descenso (24 unidades).
Un gran lío, considerando que los azules, y la gran mayoría de los equipos, quedarían con un partido menos y no tendrían la chance de pelear por salir de la zona roja.
Al ser consultado sobre qué debería pasar si el torneo se da por finalizado, Cesare Rossi, presidente de los "Dragones Celestes", sostuvo a Emol que "sería extremo suspender el torneo, pero nos estamos dando cuenta de que no están dadas las condiciones para seguir jugando (...) los partidos jugados ya están, los puntos están y es lo que corresponde. Por algo se jugaron los partidos".
Por otro lado, Calera sumaría 37 puntos y perdería la chance de alcanzar a Palestino (38 unidades), club que está tercero y accediendo a la segunda fase de la Copa Libertadores.
Ahora habrá que esperar para ver cuál será la decisión de las autoridades para saber qué ocurre con el fútbol. La opción de que no continúe el campeonato está latente y cualquier decisión será un dolor de cabeza para la ANFP.
