Lillo, Guardiola y Juan Pablo Sorin en un entrenamiento del Bayern.
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No es oficial, pero prácticamente es un hecho. Juan Manuel Lillo, ex asesor de la selección chilena, será el nuevo ayudante de Pep Guardiola en el Manchester City. Será su mano derecha.
Los medios españoles dan por hecha la operación y aseguran que el acuerdo está cerrado. Quien fuese colaborador de Jorge Sampaoli en la "Roja", ahora trabajará con uno de los técnicos más exitosos de la historia.
Pero la llegada de Lillo a las filas el ex DT del Barcelona no es casualidad. Hay una historia detrás, una que explica cómo se forjó el vínculo entre ambos estrategas.
Todo se remonta a México. Ambos coincidieron en el Dorados de Sinaloa en 2005 y allí iniciaron una relación que ahora uniría sus caminos en el conjunto inglés.
Por ese entonces, Lillo era el entrenador del club azteca y Guardiola vivía el final de su etapa como futbolista. De hecho, colgó las botas allí.
No sólo lo dirigió, también le dio la oportunidad de ser por un tiempo su "ayudante", lo que sería el puntapié inicial para que luego Pep se convirtiera en adiestrador.
Guardiola "es como un hijo para mí"
Juan Manuel Lillo
"Él (Guardiola) era muy estudioso, le gustaba mucho leer. Pasaba con Lillo y se la pasaba viendo fútbol, leían revistas, periódicos y platicaban del mundo del fútbol. Todos los días le tenía que comprar revistas de fútbol", contaba un miembro del elenco azteca.
Los lazos entre ambos se estrecharon por aquel entonces, a tal punto que años después el ex asesor de la "Roja" catalogaría a su ex pupilo como un "hijo".
"Es una de las personas más importantes de mi vida, es un como un hijo", decía Lillo en entrevista con el New York Times en 2016.
Ambos en su época en Dorados.
Con el paso de los años ambos han mantenido el constante diálogo, incluso, según el ex colaborador de la selección chilena, su compatriota lo quiso llevar al Barcelona.
Los elogios de Guardiola a Lillo no han faltado durante estos años reconociendo que quien fuese su técnico en México es uno de los "colegas" que han influido fuertemente en su carrera.
Ahora Lillo y Pep tienen todo listo para reencontrarse y trabajar juntos en Inglaterra. Sólo falta la oficialización.
Una polémica salida
Respecto a lo que fue el paso de Lillo por la "Roja", llegó poco después de la obtención de la Copa América 2015.
Su trabajo consistía en asesorar a Sampaoli en labores con la adulta, pero también influir en las labores con las selecciones menores. De hecho comandaba los grupos de "sparrings".
Fueron algunos meses en la selección nacional, pues cuando su nombre surgió para suplir la salida de Sebastián Beccacece, mano de derecha del casildense, todo se fue a pique.
El entonces presidente de la ANFP, Arturo Salah, no aprobó su llegada debido a la incertidumbre que había por el futuro de Sampaoli y finalmente Lillo terminó dejando el país.
