Siempre se ha hablado de por qué Bielsa no entrena a los mejores equipos. Ofertas ha tenido en el pasado, pero se ha inclinado por otro tipo de proyectos. Al arquero del Leeds, Kiko Casilla, se le ha preguntado sobre esto.
"Quizá ha tenido la oportunidad de entrenar a un gran equipo y no ha querido. No lo sé, hablo por hablar, pero puede que se siente más cómodo en otro tipo de retos como llegar al Leeds y hacer escuela, mejorar el club desde la base. No solo la calidad del futbolista, si no que potenciar la academia, porque a menudo sube a chicos jóvenes. Le interesa dejar un legado más allá de ganar o perder", expresó en entrevista con Mundo Deportivo.
La misma opinión tiene Mario Zanabria. Este hombre lo conoció en México. Bielsa por primera vez salía de Argentina y planeó todo cuidadosamente. Al principio trabajó como director deportivo para reforzar las inferiores de Atlas y puso como DT del primer equipo a Zanabria. Cuando vio que todo estaba acorde a sus expectativas, asumió el cargo de entrenador en jefe.
"Creo que en ese sentido él no ha cambiado. Siempre fue así. Rompe la media de los entrenadores para tomar clubes. Él lo hace a través de un estudio minucioso de lo que es la institución, la gente que lo preside y demás. El proyecto debe ser aceptado desde la A hasta la Z", comentó en diálogo con Infobae.
Antes de aceptar, Bielsa analiza cada detalle. La historia del club, la hinchada, la identidad social construida a lo largo del tiempo, el rendimiento en las temporadas anteriores, cada jugador del plantel.
"Nos sentamos con él en un hotel 12 horas. Vimos que tendríamos que explicarle la visión y el potencial de Leeds. Mi trabajo era que firmara el contrato y negociar las condiciones comerciales. Fue muy frustrante porque no conseguí que se interesara por nada de eso", contó el CEO del Leeds Agnus Kinnear en el documental Take Us Home.
Bielsa sabe lo que vale y cobra de acuerdo al mercado. No regala nada. Pero no es el dinero lo primordial para él.
"El proceso necesita de un tiempo acorde. Muchas veces llaman de un día para el otro, pero él normalmente no agarra equipos en el medio de temporada. Eso obedece a que tiene que hacer un análisis profundo del equipo, la institución, la estructura, un estudio profundo de cada jugador. Es terrible el trabajo minucioso que hace y la radiografía tiene que ser muy estricta. A partir de ahí él toma la decisión en lo deportivo", reveló una fuente que prefirió mantenerse en off.
Ricardo Lunari agregó que le trajo una lista con 60 o 70 jugadores del fútbol chileno antes de tomar la "Roja" en 2007.
"Conversé con él cuando tuvo la oferta de la selección de Chile, que fue un proceso larguísimo como de dos meses. Él no se deja seducir por cosas rápidas, tiene que estudiar. Una vez me llamó, estaba en Rosario y me pidió que lo llevara a su campo. Me dijo: '¿A usted no le molesta que me siente en el asiento de atrás? Porque atrás voy con revistas de Chile –tenía muchas revistas– y voy mirando'".
