Neymar estaba en llamas, muy molesto. El brasileño fue uno de los cinco expulsados tras la pelea en el escandaloso clásico entre el PSG y el Marsella.
El delantero se fue de la cancha
denunciando racismo por parte del español Álvaro González, algo que ya había hecho durante el transcurso del encuentro.
Según el sudamericano, el defensa lo trató de "mono" en varias ocasiones y, por ello, reaccionó sobre el final con un manotazo en la cabeza que le costó la tarjeta roja. Y no se arrepiente.
"Que el VAR capte mi 'agresión' es fácil, ahora quiero ver la imagen del racista llamándome mono hijo de put... eso quiero ver", fue uno de los explosivos mensajes de Neymar en Twitter.
Y no fue el único. Hubo otro más potente. "Mi único arrepentimiento es no haberle dado en la cara a ese imbécil", lanzó.
González también se pronunció en las redes sociales. "No existe lugar para el racismo. Carrera limpia y con muchos compañeros y amigos en el día a día. A veces hay que aprender a perder y asumirlo en el campo. Increíbles tres puntos hoy", señaló junto a una foto con varios compañeros.
Y Neymar fue a responderle directamente en ese mensaje. "No eres un hombre porque no asumes tus errores. Perder forma parte del deporte, pero insultar y traer el racismo en nuestra vidas, no. Y no estoy de acuerdo. No te respeto. No tienes personalidad. Asume lo que dices y sé un hombre. Racista".
La pelea que se armó en el final del encuentro acabó con cinco expulsados en un escandaloso partido por la Liga francesa.
