Tras vencer a Perú, Chile viajó a Caracas para enfrentarse a Venezuela el martes. Sumar de visita en Clasificatorias nunca es tarea fácil, pero choca con una escuadra a la que comienza a carcomerla la desesperación. Ha perdido todos sus partidos y no tiene goles a favor.
Luego de la salida de Rafael Dudamel, se suponía que Jorge Sampaoli iba a asumir la banca de la "Vinotinto". Sin embargo, las negociaciones se cayeron y llegó un rostro desconocido para muchos: José Peseiro.
El técnico portugués tiene su historia. Anduvo por el Real Madrid y jugó una final de la Copa de la Uefa con dos chilenos.
Peseiro fue futbolista profesional, pero solo pudo jugar en clubes de segunda división en su país. Sin tanto nombre, arrancó dirigiendo en el ascenso y rápidamente destacó. Al Nacional de Madeira lo llevó de tercera a primera en solo tres años. Tan importante es para el club que lo denominaron "Entrenador del Siglo".
Es un estratega "moderno", que se siente más cómodo teniendo la pelota, atacando más que defendiendo. Al menos eso en el papel. Los llaneros reclaman que se mete muy atrás.
De Portugal viajó a España. Llegó a la capital para trabajar junto a su compatriota Carlos Queiroz, hoy DT de Colombia, en el Real Madrid. Ese equipo de los merengues era conocido como "los galácticos". Zinedine Zidane, Ronaldo, David Beckam, Roberto Carlos, Raúl fueron algunos de los cracks con los que se topó en el Santiago Bernabéu.
El millonario proyecto madridista fracasó y fue despedido. Regresó a Portugal y fue contratado para ser el primer entrenador del Sporting de Lisboa. En los verdiblancos dirigió a los chilenos Rodrigo Tello y Mauricio Pinilla. También hizo debutar a Joao Moutinho y Nani. Llegó a la final de la Copa Uefa, pero perdió dolorosamente ante el CSKA de Moscú en su propio estadio.
Luego tuvo malos pasos por Rumania y Grecia. Asumió en la selección de Arabia Saudita, que venía de cuatro mundiales consecutivos, y no pudo guiarla a Sudáfrica 2010. Perdió, además, la final de la Copa del Golfo y acabó último en la fase de grupos de la Copa de Asia 2011.
Otra vez volvió a Portugal. Con el Sporting Braga ganó la Copa de la Liga y consiguió clasificar a Champions. Sin embargo, sus últimas temporadas han sido oscilantes. Obtuvo malos resultados en el Sporting de Lisboa, el Porto y en Emiratos Árabes Unidos. Ninguno de esos procesos alcanzó a durar un año.
En Venezuela se ha encontrado con una federación convulsa y caminos bifurcados. La urgencia es grande y las dudas crecen. Ante Chile espera comenzar a repuntar.
