Mike Tyson es uno de los personajes más controvertidos del deporte. El ex campeón mundial de boxeo pasó de la gloria al infierno por sus adicciones. Hoy, a sus 54 años, se prepara para volver a subirse al ring en un combate de exhibición.
Una vez por semana, "Iron Mike" está en el podcast Hotboxin. Le preguntaron si había boxeadores que peleaban ebrios.
"Ha habido peleadores que lo hacían. No pueden pelear sin beber, tienen que estar borrachos para pelear. No tienen valor, tienen que estar borrachos. Campeones del mundo. No pueden hacer esta mierda sin su maldito alcohol", afirmó.
El púgil de Brooklyn también recordó a Tommy Morrison, campeón mundial de peso pesado que actuó en Rocky V y que falleció en 2013 luego de varios años padeciendo VIH.
"El tipo tenía VIH, y cancelaron su pelea, el evento principal. Yo estaba como 'mierda si él se contagió... sé que él no se mete en más líos que yo y no hace las mierdas que yo hago'. Yo estaba como, 'Maldita sea, estoy muerto, mierda'", comentó´.
Pese a los excesos en vida, Tyson no se contagió. "Le daba dinero a la gente, a todos, festejaba con todos y tenía sexo con sus madres, sus hermanas y sus primas... orgías. Estaba loco. Estaba tan enfermo y no tenía idea de que estaba tan enfermo", expresó.
El rival en su regreso será Roy Jones Jr. Se especuló con el nombre de Evander Holyfield y se generó mucho morbo. La imagen en que Tyson le arranca la oreja de un mordisco no se olvida pese al paso del tiempo.
"Bueno, si hace lo que estaba haciendo para ser mordido, le volvería a morder, sí. Le mordí porque quería matarlo. Estaba realmente enojado porque me golpeó la cabeza y todo. Me sacó de mi plan de lucha y de todo. Escucha, bueno o malo, no voy a dejar que nadie se lleve mi gloria", cerró.
