La conmoción por la muerte de Diego Maradona no termina. De tanto coquetear con la muerte, a veces daba la impresión que sería inmortal.
En estas horas se han desempolvado varios recuerdos del "Pelusa". Algunos de ellos tienen vínculo con Chile. Vino a este país a jugar con Argentinos Juniors, la selección trasandina y también con Boca.
El 24 de septiembre de 1997 Maradona llegó al Monumental junto al plantel xeneize para enfrentar a Colo Colo por la extinta Supercopa. Era la tercera fecha de la fase de grupos y el equipo chileno ya le había plantado cara al Cruzeiro y a Independiente.
El elenco argentino estaba repleto de figuras. Esa noche formó con Óscar Córdoba, Sergio Castillo, Jorge Bermúdez, Nestor Fabbri, Rodolfo Arruabarrena, Nolberto Solano, Alfredo Berti, Diego Cagna, Diego Maradona, Claudio Caniggia y Luis Hernández.
Gustavo Benítez, en cambio, salió a la cancha con Claudio Arbiza, Mario Salas, Raúl Muñoz, Pedro Reyes, Francisco Rojas, Emerson Pereira, Marcelo Espina, Marcelo Barticciotto, José Luis Sierra, Ivo Basay y Richard Zambrano.
Las graderías estaban repletas. Colo Colo vivía una gran época y el “10”, pese a estar ya muy lejos de su mejor versión, seguía provocando el delirio de las masas. Un par de destellos demostraron que pese a los problemas que lo tenían hundido seguía siendo un distinto.
Caniggia salió por lesión y lo reemplazó un joven Martín Palermo. Maradona y compañía todavía estaban tratando de acomodarse Marcelo Espina abrió la cuenta con un tiro libre.
La alegría se desvaneció apenas un minuto después. El mexicano Luis Hernández batió a Arbiza para poner el empate.
En el segundo tiempo, los albos tomaron el mando del encuentro. Presionaban alto e iban al frente. El tanto de la victoria lo convirtió Ivo Basay luego de un buen centro del "Coto" Sierra.
Ese fue el único duelo Conmebol a nivel de clubes que disputó Maradona. También fue el penúltimo partido profesional antes de retirarse definitivamente.