Michael Jordan y Scottie Pippen se llenaron de gloria con los Chicago Bulls durante los noventa. Sin embargo, la relación entre ambos es distante y se hizo tensa después de The Last Dance.
En la serie documental, Pippen queda como alguien egoísta, incluso caprichoso. El eterno escudero de Jordan se molestó. El 9 de noviembre se publicará su autobiografía Unguarded y la revista GQ tuve acceso a un fragmento exclusivo.
"Los dos últimos episodios se emitieron el 17 de mayo. Al igual que los ocho anteriores, glorificaron a Michael Jordan sin dar elogios suficientes a mí y a mis orgullosos compañeros de equipo. Michael merece una gran parte de la culpa por eso. Los productores le habían otorgado el control editorial del producto final. El documental no podría haber sido publicado de otra manera. Él era el protagonista y el director", escribió Pippen.
Pippen siguió disparando. Se mostró molesto con el tratamiento de la historia en The Last Dance.
"Michael estaba decidido a demostrarle a la generación actual de fanáticos que él fue el más grande de todos durante su tiempo, y aún más grande que LeBron James, el jugador que muchos consideran no sólo su igual, sino superior. Así que Michael presentó su historia, no la historia del The Last Dance", expresó.
Por cortesía de ESPN, Pippen pudo ver los primeros ochos episodios de forma exclusiva. Narró qué le parecieron.
"No podía creer lo que veía. Una y otra vez, el foco de atención brillaba en el número 23. Incluso en el segundo episodio, que se centró durante un tiempo en mi difícil educación y mi camino poco probable hacia la NBA, la narrativa volvió a MJ y su determinación de ganar. Yo no era más que un accesorio. Su ‘mejor compañero de equipo de todos los tiempos’, me llamó. No podría haber sido más condescendiente si lo hubiera intentado", declaró.
"Cada episodio era el mismo: Michael en un pedestal, sus compañeros de equipo secundarios, más pequeños, el mensaje no era diferente de cuando se refirió a nosotros en ese entonces como su 'elenco de apoyo'. De una temporada a la siguiente, recibíamos poco o ningún crédito cada vez que ganábamos, pero la mayor parte de las críticas cuando perdíamos", agregó.
Pippen contó que Jordan recibió 10 millones de dólares por el documental, pero que no hubo ni un peso para el resto de los jugadores que aparecieron. "Otro recordatorio del orden jerárquico de los viejos tiempos", dijo. Pippen habló de una experiencia "insultante" al ver el documental
"Ahora aquí estaba yo, a mediados de mis cincuenta, 17 años desde mi último juego, viéndonos degradar una vez más. Vivirlo la primera vez fue bastante insultante. ¿Cómo se atreve Michael a tratarnos de esa manera después de todo lo que hicimos por él y su preciosa marca? Michael Jordan nunca habría sido Michael Jordan sin mí, Horace Grant, Toni Kukoc, John Paxson, Steve Kerr, Dennis Rodman, Bill Cartwright, Ron Harper, BJ Armstrong, Luc Longley, Will Perdue y Bill Wennington. Pido disculpas a todos los que he dejado fuera", manifestó.