Ni Vidal ni Aránguiz ante Argentina, sería un gran problema.
Mariola Guerrero, El Mercurio
Queda menos de un mes para que Chile vuelva a la cancha en las Clasificatorias y Martín Lasarte ya tiene un puzzle que resolver en su cabeza.
El mediocampo vuelve a ser un dolor de cabeza para el entrenador de la selección chilena con miras al duelo ante Argentina del 27 de enero en Calama.
Otra vez es muy probable que Charles Aránguiz no llegue. Una lesión en la pantorrilla dejaría fuera al volante. Según el Bayer Leverkusen, estará sin jugar hasta finales de enero.
Lo del "Príncipe" no es lo único. Arturo Vidal no estará disponible por suspensión. O sea, lo más seguro es que sean dos bajas fundamentales para una jornada clave camino al Mundial.
Como si fuera poco, lo de Erick Pulgar es una interrogante. Recién viene saliendo de una lesión y aunque quedan tres semanas, esta temporada apenas ha jugado. Cinco partidos en el presente Calcio, 4 de ellos titular.
Entonces, ¿qué pasa si Aránguiz finalmente no llega y se enreda lo de Pulgar?
Suenan de inmediato dos nombres, los más recurrentes en la era Lasarte cuando algún emblema del mediocampo no ha estado: Claudio Baeza y Diego Valdés.
Ahora, otra alternativa es la de Marcelino Núñez, también bastante requerido por el DT uruguayo y que ha dejado gratas sensaciones.
De estos tres jugadores saldrían los elegidos, incluso, los tres podrían ser parte de un posible 11 titular ante Argentina en caso que ninguno de los habituales estelares llegue.
No se puede descartar otra posibilidad. Tomás Alarcón también podría ser alternativa, aunque en la era Lasarte siempre ha estado más atrás de los jugadores mencionados.
Quedan semanas, pero de seguro el técnico uruguayo ya piensa en nombres y fórmulas para lo que viene frente a la "Albiceleste" en Calama y luego Bolivia en La Paz.
