El Atlético Madrid empató 2-2 con el Villarreal por la Liga en un partidazo.
Pero sin dudas lo más destacado fue el tremendo golazo de
Ángel Correa para abrir la cuenta.
El delantero argentino del Atlético interceptó una pelota en la mitad de la cancha y sin pensarlo remató al arco, sorprendiendo a todos.
El balón se metió y la ovación fue gigantesca. Un verdadero golazo que ya lo postulan al Puskas.