Higuaín jugando para la selección trasandina en el Mundial de Rusia.
AFP
Gonzalo Higuaín ha tenido una destacada carrera. Jugó para Real Madrid, Napoli, Juventus, Chelsea y Milan en Europa. Actualmente está en el Inter de Miami de la MLS.
Pese al éxito, el "Pipita" se muestra cansado del ambiente del fútbol.
"Superé ampliamente las expectativas que tenía y soy un agradecido de todo lo que me dio el fútbol aunque tengas que pagar un alto precio por eso. Y no hablo de lo económico, sino de vida. La exposición, la maldad, el vivir juzgado todo el tiempo. Qué haces y qué dejas de hacer... Cuando eres niño, no te imaginas eso", comentó en Univision.
"La gente no tiene ni idea de lo que es un jugador de fútbol. Cree que jugamos al fútbol y ya está. Tenemos padre, tenemos madre, como ustedes. Y tenemos las mismas miserias que tenemos todos", agregó.
Higuaín jugó tres finales con Argentina. La del Mundial 2014 y la de las Copas Américas 2015 y 2016. En todas tuvo ocasiones para convertir, pero no pudo. Las críticas fueron feroces.
"Fracasar no es perder una final, fracasar es no lograr ser lo que quisiste ser. O no levantarte. Yo lo llamo más frustración. Las finales se definen por lo que hiciste antes, ¿o el Mundial se juega la final nada más? Se juegan los grupos, los octavos, cuartos y semis. Nuestra generación estuvo 19 partidos invicta en las tres competiciones, ni siquiera en las finales perdimos en los 90. 'Pero Argentina en las tres finales no metió gol', dicen. Y ellos tampoco", afirmó.
Higuaín tiene claro cuál será su relación con el fútbol después del retiro.
"Será lejos del fútbol, claramente. Muy lejos. Lo voy a disfrutar hasta que lo juegue, pero después ni cerca. Es una contaminación muy mala. No es dolor ni molestia, siento que no es el mundo en el que quiero estar", declaró.
Por último, dejó una reflexión: "Cuando uno empieza a jugar, dice 'uy qué bonito todo'. Cuando lo empiezas a conocer a fondo, las maldades, las envidias, los celos... Ya teniendo todo lo que tengo, lo más importante, que es mi mujer y mi hija, ¿para qué volver a meterme en esa burbuja? ¡No!".