Parecía que el gran damnificado por la pésima temporada de la U era Santiago Escobar y consumada su salida el foco se concentraba en la búsqueda del nuevo técnico. Pero el colombiano no se iría sólo.
Luis Roggiero está más fuera que dentro del club. Al gerente deportivo se le pidió la renuncia, no aceptó, pero todo conduce que su partida es inminente. Su salida se sigue negociando.
Al ecuatoriano lo responsabilizan de una ola de malas decisiones. "Perdió todo el piso", apuntaron desde Azul Azul a El Mercurio. Históricos del club también lo critican duro en diálogo con Emol.
"Lo mejor que puede pasar es que se vaya. Nunca debió llegar, no tuvieron que traerlo porque no conocía este fútbol. La diferencia entre Chile y Ecuador es grande, quizás allá tuvo suerte porque acá demostró que no tenia idea, estaba ciego", lanza Héctor Hoffens.
Horacio Rivas fue en la misma línea. "Es una perdida necesaria, beneficiosa. Desde su llegada nunca hubo una línea definida y hoy estamos en una situación complicada por las decisiones que se tomaron desde la llegada de este muchacho, que nunca debió haber llegado", sentencia.
"Ahora ya se va y lo que venga ahora debe ser positivo, deben aprender de las malas experiencias por eso su salida es beneficiosa. Hay gente mucho más preparada que él, se cometió un error con traerlo, su fichaje fue algo muy negativo, nunca correspondió que llegara. Al menos hoy se está enmendando el camino porque el club reconoce el error de traerlo", agrega.
Sandrino Castec se suma a los dardos contra el ecuatoriano. "Nunca quiso hablar, decir qué proyecto quería para la U. Nunca dio a conocer nada, eligió mal los jugadores para el técnico que trajo. Se encontró con que aquí era diferente a lo que hizo en Ecuador", dice.
"El primero que tenía que salir era él y si se confirma que se va, es una señal de que la U quiere hacer las cosas bien. A él le dieron el poder para tomar decisiones, pero en el tiempo que estuvo uno ve que las cosas se hicieron peor que antes", añade.
Pero no sólo Roggiero es apuntado, también el plantel. "Los jugadores no toman el peso, se ven muy relajados, han sido incapaces de darse cuenta de lo que está pasado, tienen gran responsabilidad en todo esto", argumenta Castec.
