El Real Madrid completó una hazaña en Champions. Otra más. Cuando parecía abatido, hizo pesar su historia y forzó el alargue ante el Manchester City. Lo terminó ganando 3-1 el cuadro merengue y jugará la final contra el Liverpool.
Cuesta entender lo del Madrid. Es el equipo más ganador de la Champions y su relación con el torneo parece mágica. En esta edición se vio superado por PSG, Chelsea y ahora por el City. Sin embargo, la épica parece sobrevolar el Santiago Bernabéu. Reducto inexpugnable para los colosos del "Viejo Continente".
Fue un partido intenso desde el comienzo. El Madrid salió impulsado por el 4-3 que padeció en la ida y el City intentó controlar a través de la posesión. Hubo llegadas en ambos arcos. Karim Benzema cabeceó solo entre los centrales y la tiró por arriba. Luego, Thibaut Courtois tuvo dos atajadas tremendas para salvar al merengue.
Al inicio del segundo tiempo Vinicius Junior erró un gol increíble debajo del arco. El local se veía mejor pese a no tener tantas claridades. El City, en cambio, perdía la pelota con mucha facilidad.
Pero a los 73' llegó el gol del elenco de Pep Guardiola. Bernardo Silva condujo magistralmente por el medio y abrió a la derecha para que Riyad Mahrez resolviese con un zurdazo alto.
El Real Madrid necesitaba dos goles para ir a la prórroga. Sin embargo, no se veía por dónde. El City era dueño del encuentro y tuvo varias ocasiones para aumentar. Thibaut Courtois se lució en dos ocasiones y hubo un despeje en la raya.
El tiempo corría y el final era inminente. Pero ese momento tan complejo es la hora más esperada por el Madrid. A los 90' la pelota se iba por la línea de fondo, pero Karim Benzema estiró la pierna y sacó un centro atrás para que Rodrygo conectase en área chica. Un minuto después, el propio Rodrygo se elevó y metió el cabezazo para mandar la serie al alargue.
El merengue cambió de fisonomía. De ser dominado pasó a dominar en un tris. A los 94' se cobró penal y Karim Benzema no falló. El Bernabéu era pura efervescencia.
El City estaba aturdido ante un rival imperial. La escuadra de Carlo Ancelotti selló con eficiencia todos los caminos hacia su arco y le cortó los circuitos a los ingleses.
La final se disputará el próximo 28 de mayo en el Stade de France. El Madrid irá por su "Orejona" número 14. Pase lo que pase ante Liverpool, lo vivido ante el City este miércoles no se olvidará nunca.