Universidad Católica sufrió una dura caída ante Curicó Unido. Los Cruzados ganaban por dos tantos a cero, pero el elenco "tortero" no bajó los brazos y aprovechó los errores de la UC para dar vuelta el marcador y quedarse con la victoria por 3-2. Tras el encuentro, el director técnico precordillerano, Ariel Holan, hizo su lectura del encuentro con una fuerte autocrítica.
"Hasta el contragolpe que viene de un mano a mano del Chapa con el arquero de Curicó, habíamos jugado un muy buen partido.
Después de ese gol, a pesar de que tuvimos un par de situaciones, ya no teníamos el mismo volumen de juego. Ese fue uno de los motivos principales por los que no nos empezamos a defender con la pelota y cuando Curicó tuvo la pelota tampoco defendimos bien", explicó Holan.
"El partido se pudo haber definido porque Fuezalida y Zampedri estaban debajo del arco y tapó muy bien el arquero de Curicó. Si era el 0-3 el partido se cerraba. Nosotros después del primer gol (de Curicó) no pudimos hacer pie, ni con los cambios tampoco. La cancha se puso complicada, no podíamos controlar bien la pelota. Tratábamos de controlar el balón. Curicó, el gran mérito que tuvo, fue no darse por vencido y sostener la intensidad a fondo durante todo el partido", agregó.
"Sin pelota no defendimos bien. La verdad es esa.
Me preocupa mucho porque es algo que no he podido corregir. En la primera rueda fuimos uno de los equipos con más goles en contra, y en los últimos tres partidos, distintos entre sí, hemos cometido muchos errores y
nos han hecho muchos goles. Tengo que trabajar muy duro todo el sistema defensivo. No vi al equipo intenso ni agresivo para defender", señaló el estratega.
Respecto a las metas que tienen para el semestre la posibilidad del pentacampeonato, que se ve lejano con la derrota de hoy, fue claro.
"Lo que dije es que tenemos que terminar lo más arriba en el campeonato y hacer una gran Copa Chile. Lo dije porque nos reforzamos muy bien. Estamos construyendo un equipo para el 2023. Con eso, tenemos futbolistas que se han incorporado al equipo, que serán un salto de calidad, pero que su realidad en el último semestre se interrumpió por vacaciones lógicas, que no coincidieron con las del equipo, como el de Dituro. O el caso de Aued que no jugó durante seis meses. El caso de Isla que jugó poco el semestre en Flamengo y el caso de Pinares también", aseguró.
"Estoy contento con el mercado de pases que hicimos, pero tendremos que tener mucho trabajo, paciencia y autocrítica para mejorar en el corto plazo. Porque soy responsable y el conductor del equipo, y de armar un equipo que tenga un nivel de error que nos permita competir. Con este nivel de error, competir, no es tan fácil", finalizó.