Xhaka y una amarilla con tintes de escándalo.
EFE
Investigación que levanta polémica en Inglaterra. Granit Xhaka, figura del Arsenal, está en la mira por una jugada que hizo en un partido ante el Leeds de Marcelo Bielsa la pasada temporada.
La acción en cuestión está en el ojo del huracán por supuesto arreglo de partidos. Al mencionado jugador
le sacaron tarjeta amarilla por hacer tiempo en la recta final del encuentro.
Uno de los sospechosos, según el Daily Mail, es el ex futbolista sueco de origen albanés Alban Jasufi, que jugó la mayor parte de su vida en Suecia en equipos de segundo nivel.
Jasufi es uno de los principales sospechosos, pues fue quien apostó la mayor cantidad a la amonestación de Xhaka y ya tiene historial en este tipo de casos: En 2017 fue suspendido por cuatro años luego de ser acusado de sobornar al portero del AIK para que tuviera un mal rendimiento.
En aquella ocasión habría desembolsado 200.000 euros en el soborno del guardameta.
De acuerdo al rotativo inglés, la jugada de Xhaka está bajo investigación por "supuesta conspiración que implica a la mafia albanesa. En ese encuentro se apostaron unas 52.000 libras (más de 60.000 euros) a que el volante del Arsenal sería amonestado en los últimos diez minutos, como así ocurrió".
"Los investigadores de la Agencia Nacional del Crimen están estudiando una supuesta conspiración criminal. Los investigadores de la NCA han descubierto pruebas de que se han apostado sumas significativas en criptodivisas en mercados que no están regulados en este país, con gran parte de la actividad que se entiende que ha tenido lugar en Albania", sentencian.
Si bien no se aclara si Jasufi fue el máximo ganador, se reveló que el apostador más afortunado obtuvo más de 300 mil euros con su movimiento.