Marcelo Ríos terminó su relación con el joven chino Juncheng "Jerry" Shang, tenista de 17 años al que llevó a conquistar su primer torneo challenger, con el que igualó un récord de precocidad del español Carlos Alcaraz.
Bajo la dirección de Ríos, Shang escaló al puesto 195 del ranking de la ATP, y en dos meses lo llevó a ganar un torneo y ser finalista de otro en Estados Unidos.
Sin embargo, todo terminó en poco tiempo. Tras su derrota en segunda ronda del Challenger de Cary, el ex número uno del mundo fue comunicado de la decisión mediante su agente.
"A mí no me dieron ninguna razón por la que terminamos. No me dijeron ‘no te gusta cómo te vestís’. Esto lo supe por mi agente, que me dice ‘malas noticias, no vas a seguir con Jerry’. Dije ‘ah, perfecto’", dijo Ríos en conversación con La Tercera.
El ganador de 18 títulos ATP reveló además que "justo venía en el avión de Atlanta a Sarasota. Me bajé y pillé de sorpresa a Jerry y sus papás y les pregunté ‘¿así que terminamos?’. No se esperaban que yo supiera, pensaban decírmelo a través del agente. Y el papá me dice ‘sí'. Le respondí ‘todo perfecto, pero me encantaría saber la razón por la que terminamos’".
Tras no entender la explicación del padre, el "Chino" le preguntó a su ex pupilo y este le respondió: "Mi papá lo dice...".
"Esta fue una decisión del papá. No fue decisión de Jerry. Aparte la mamá y el papá se agarran todo el día y eso le hace mal", sentenció el ex líder del escalafón planetario.
Por último, el ex tenista nacional aseguró que "es una cultura muy difícil. Es súper difícil convivir con ellos, no estoy dando excusa de nada, pero que me echen y me digan ‘hicimos cuatro primeras rondas'. Pero el tipo hizo dos finales y está 190. Pero da igual. A mí no me influye. Yo te digo la verdad: no lo estaba pasando bien con el viejo (el padre)".