Ignacio Morales consiguió un logro histórico para el deporte chileno. En Asunción, el taekwondista venció al brasileño Edival Marques, actual número uno del mundo, y se consagró tricampeón en Juegos Suramericanos. Ya había obtenido el primer lugar en Santiago 2014 y Cochabamba 2018.
El deportista de 27 años conversó con Agenda Deportes Emol TV este jueves. Se mostró feliz y entusiasmado respecto a su futuro, pero también expresó su molestia con la Federación de Taekwondo. ¿El motivo? No lo inscribieron en importantes torneos para los que se ganó el derecho a competir.
"Yo creo que todos intentan hacer bien su trabajo, pero existen errores administrativos que perjudican a los atletas. Estaba clasificado a varios Grand Prix, que entran los 30 mejores del mundo, y yo avisé con anticipación. Para ese evento hay que registrarte y dos veces no se hizo. Solo tenían que apretar un botón. De los cuatro Grand Prix me enviaron a dos. Las cosas van mejorando, pero siempre se puede más", contó.
Morales explicó que los Grand Prix son el segundo evento más importante de su deporte, solo por detrás de los Juegos Olímpicos.
En los Grand Prix puede medirse ante la elite y puede sumar puntos que le permitan clasificar a la cita de los cinco anillos.
"Yo no veo malas intenciones, pero sí muy malas gestiones. Tras el primer Grand Prix que no fui inscrito, hicieron un cambio del gerente técnico de la Federación, fue despedido por las negligencias. El nuevo lo estaba haciendo mejor, pero volvió a pasar lo mismo", relató.
El no ser inscrito para los Grand Prix fue un golpe duro para él. La noticia le llegó, además, cuando se preparaba para ir a buscar el oro en los Juegos Suramericanos.
"Cuando no fui inscrito, fue antes de los Odesur, mi mente se fue a la basura", apuntó.
El taekwondista dijo que puede vivir del deporte, aunque se le hace difícil. Muchas veces tiene que poner de su bolsillo para hacer los viajes. "Fui a un Grand Prix en Francia completamente solo, sin entrenador, sin ningún compañero. Es frustrante, pero son cosas que escapan de mis manos", declaró.
Morales también repasó su historia. Partió muy chico en el taekwondo y por un taller en el colegio.
Pero antes de dedicarse a las artes marciales quiso ser futbolista. Reveló una anécdota con su papá.
"Yo quería hacer fútbol, yo me creía bueno, pero mi papá me decía que era muy malo. Entré en un colegio en que era obligatorio hacer una actividad extraprogramática y el fútbol estaba copado. Menos mal que no me metí ahí, la vida fue sabía, me llevó al taekwondo. Partí en segundo básico. Paulatinamente fui escalando, fui buscándomelas. Sin darme cuenta, llegué a la selección juvenil y después a la adulta. Fue natural mi crecimiento", afirmó.
Revisa la entrevista acá