Escándalo en el fútbol chileno. Otro más. Este sábado, tenía que disputarse el duelo entre Palestino y Antofagasta, que está pendiente de la fecha 27 del Torneo Nacional. Sin embargo, se suspendió sorpresivamente cuando los protagonistas estaban en las puertas del estadio.
Originalmente, se debía jugar la semana pasada. Pero la Municipalidad, debido a una millonaria deuda, le prohibió a los Pumas utilizar el estadio Calvo y Bascuñán. El club presentó un recurso en la Corte de Apelaciones y fue acogido. El duelo se reprogramó para este sábado. Primero para las 12:30 horas y luego para los 18:00.
Los utileros, los jugadores, los árbitros y los equipos de TNT Sports no pudieron hacer ingreso al estadio, ya que no estaba disponible. El elenco árabe golpeó la mesa. Sacó un comunicado y pidió que se lo entreguen los puntos.
"Palestino espera que el Tribunal Autónomo de Disciplina haga valer el artículo 23 de las bases del Campeonato Nacional 2022, que expone que en el evento que no se pudiere disputar un partido en la fecha y hora programada, el club local será sancionado con la pérdida del partido, otorgándose los puntos al equipo rival, es decir, a Palestino", expresó el cuadro tetracolor en un comunicado.
"Palestino siempre estuvo dispuesto a hacer valer las bases del Campeonato Nacional, aceptando las dos reprogramaciones, sin embargo, ante la situación de hoy, también corresponde y es justo que el reglamento se cumpla", agregó.
Los descargos de Antofagasta
El elenco Puma se defendió y apuntó sus dardos a la ANFP. Aseguró que la decisión de reprogramar el encuentro para este sábado fue tomada entre la ANFP y la Municipalidad de Antofagasta.
"Durante la tarde (del viernes) tomamos conocimiento de la determinación de la Gerencia de Ligas de la Asociación Nacional de Futbol Profesional en orden a reprogramar nuestro partido con el club Palestino para las 18 horas del sábado 15 de octubre, determinación que habría estado motivada por un acuerdo entre la Asociación y el Municipio, del cual no fuimos parte", afirmó Antofagasta en un comunicado.
La ANFP, en tanto, se quitó responsabilidad y se mostró molestia por la decisión de la Municipalidad. "Esta situación no se condice con el acuerdo logrado", manifestó.
La situación de los Pumas es muy compleja. Están en la parte baja de la tabla y luchan por no descender. Necesitan sumar.
"Si bien todos estos hechos son fuertes distractores en momentos de alta complejidad, nuestro plantel está fuerte y más unido que nunca para obtener los desafíos que nuestro Club e hinchada demandan en esta temporada. Jugaremos y dejaremos todo en cancha para pelear nuestras opciones de mantener la categoría que nuestro Club por su historia merece", se anuncia en el comunicado.
Las imágenes del escándalo
