Carlos Alcaraz, número uno del tenis mundial, sufrió una durísima derrota en semifinales del
ATP 500 de Basilea, que se juega sobre pista rápida bajo techo.
El español sucumbió ante
el canadiense Felix Auger-Aliassime, tercer favorito, que disputará en el certamen suizo su tercera final en las últimas tres semanas.
Auger-Aliassime, número 9 del ranking, batió a Alcaraz por 6-3 y 6-2 en una hora y 22 minutos, y se medirá en la final al danés
Holger Rune.
El canadiense es la "bestia negra" del murciano, al que derrotó en los tres enfrentamientos entre ambos. Logró desbordar al español durante todo el partido y no lo dejó hacer nada, dominando el juego desde el fondo de la cancha.
Alcaraz no llega a una final desde el último US Open, el cual ganó y donde se convirtió en el líder del descalafón mundial. Desde entonces sumó un triunfo y una derrota (ante Auger-Aliassime) en Copa Davis y sucumbió en su debut en el ATP 500 de Astana.
Por su parte, el norteamericano vive una época de ensueño. Ante el hispano sumó su duodécima victoria seguida en el circuito, tras haber conquistado las coronas en Florencia y Amberes, el que unió al conseguido meses antes en Rotterdam, en febrero.
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