La historia de
Olivier Giroud es distinta a la de la mayoría de los cracks actuales, que de un comienzo de su carrera se sabía que iban a ser estrellas.
Para el ahora goleador de la selección francesa, el arranque en el fútbol fue complicado. Tuvo que lidiar con varias dificultades.
Giroud se formó en el Grenoble y debutó en el primer equipo en el 2006, cuando el club estaba en la Ligue 2, segunda categoría del fútbol galo.
Su nivel no invitaba al optimismo. Apenas anotó dos goles y se fue a préstamo al Istres FC, de la tercera división de Francia.
Ahí todo mejoró. Anotó 14 goles en 34 partidos y volvió de su cesión entusiasmado con su andar. Sin embargo, en el Grenoble le cortaron las alas de raíz: El DT Mehmed Bazdarevic lo puso inmediatamente en la lista de transferibles. "No tiene nivel para jugar en la elite", dijo.
Giroud le torció el brazo al destino. Fue traspasado al Tours de la Ligue 2 y en dos temporadas anotó 38 goles en 69 partidos. Tremendos números.
Esto captó la atención del Montpellier de la Ligue 1, quien lo fichó por 2 millones de euros. En ese punto comenzó la carrera de elite del delantero. Debutó en Primera con casi 24 años. A esa edad, por ejemplo, Karim Benzema ya estaba en el Real Madrid y Kylian Mbappé ya es campeón del mundo.
En su primer año marcó 14 goles en 43 partidos y después, en la 2011-2012, maravilló al mundo. Su club fue campeón del torneo francés desbancando al poderoso PSG.
Sus tantos fueron claves: 25 en 42 cotejos y siendo compañero del chileno Marco Estrada.
El Arsenal se fijó en él y así arrancó en los mejores clubes del mundo. En los "Gunners" estuvo desde la temporada 2012-2013 hasta el 2017-2018 marcando 105 goles en 243 duelos. Ahí también estuvo con un nacional, compartiendo ataque con Alexis Sánchez.
Pasó al Chelsea donde en cuatro años hizo 39 tantos en 117 duelos. Actualmente defiende los colores del Milan, donde ya fue campeón de la Serie A y lleva 23 dianas en 57 compromisos.
Su palmarés habla por sí solo. Trofeos de Ligue 1, cuatro FA Cup (tres con Arsenal y una con Chelsea), tres Community Shield (Arsenal), Europa League y Champions League (Chelsea) y campeón del mundo en Rusia 2018.
Pese a que no anotó goles en la Copa del Mundo en 2018, su desempeño fue clave. Además, en este Mundial de Qatar ya lleva tres goles, los que le sirvieron para desbancar a Thierry Henry como máximo goleador histórico de Francia con 52 dianas.
"No me juzguen por mis éxitos, sino por las veces que me he caído y me he levantado", dijo Giroud al diario La Stampa de Milán, citando a Nelson Mandela, a principios de este 2022.
"Olivier es un jugador increíble. Muchos de los que ahora le reivindican le han criticado durante duramente, pero Olivier siempre ha mantenido el mismo espíritu. Incluso cuando no ha sido decisivo (en Rusia 2018 no marcó ningún gol), ha sido útil para el equipo. Superar a Thierry Henry no es cualquier cosa", mencionó el DT Didier Deschamps.
Otro que lo elogió fue Vitorino Hilton, ex compañero de Giroud en el Montpellier. "Creo que, en sus inicios, lograr este récord era impensable para el propio Olivier, por muy optimista que fuera. La crítica ha sido muy injusta con él. Es un jugador muy infravalorado. Obviamente, no tiene las características de Benzema o Mbappé. Es un goleador, un '9' de área. Siempre hace goles y ayuda mucho al equipo sin balón", dijo a Marca.
Al artillero de 36 años le costó mucho, por eso ahora lo disfruta el doble. Ahora se prepara para un desafío mayor: Los cuartos de final en Qatar ante Inglaterra. ¿Podrá ser bicampéon del mundo?
