A Luis Silva le gustan los tatuajes. En su piel aparecen el nombre de su fallecida abuela Elvira, una frase religiosa y un león. Dice que esas marcas que lleva le ayudan para tener siempre presente que "hay que mantenerse fuerte en la vida".
Silva acaba de ser escogido por el Círculo de Periodistas Deportivos como el mejor futbolista amateur de Chile. Juega para Deportes Colina y fue el goleador de Tercera A con 20 tantos. Han sido días raros para él, de una felicidad a medias. El pasado domingo se le escapó el ascenso al fútbol profesional. Su equipo perdió por penales con Rengo.
"La verdad tengo más amargura que felicidad en estos momentos porque es el sacrificio de un año, como grupo dejamos cosas de lado. Estuvimos muy cerca del objetivo, eso es lo que más duele. Estuvimos a tres minutos de que terminara el partido y lograr el ascenso. En lo personal estoy contento porque cumplí. Cuando llegué dije que venía a ser goleador, a hacer un papel importante", le comenta a Emol.
Silva tiene 22 años. A los 14 se unió a las inferiores de Cobresal y pasó ahí buena parte de la adolescencia. Pero no llegó a debutar profesionalmente con el elenco minero.
"Llegó un momento en que me preguntaron si quería seguir o si no. Yo pregunté que con qué fin. Desde muy niño me decían que me iban a mandar a El Salvador, donde está el primer equipo, me decían que tenía proyección, que iba a ir a entrenar aunque sea una semana para ver. Al final no pasó nada, terminé saliendo, no yendo más", dice.
Hubo incertidumbre. Muchos pensamientos cruzándose en su cabeza. Pero dice que nunca contempló retirarse. Lo que le da el fútbol no se lo da nada más.
Sin opciones en el profesionalismo, llegó al fútbol amateur. Primero jugó en Tricolor en la Tercera B y luego pasó a Limache en Tercera A.
Conoció categorías altamente competitivas, guerreras, con canchas engorrosas y ambientes impetuosos, en la que conviven equipos organizados y otros que no tienen ni dónde entrenar.
En Tercera no hay contratos. Los jugadores se las arreglan por sí mismos y el peso de su ambición es puesto a prueba continuamente. Silva fue buscando el despegue, que alguien lo viera.
"Los jugadores se quieren mostrar, quieren mejores oportunidades. A veces no las tienen. Tienen que bajar a Tercera y demostrar que tienen las condiciones. A la mayoría el fútbol no les da para vivir. Si estás en Tercera, tienes que tener algo más o que tu familia te apoye. Es un tema complicado. Tengo el ejemplo de compañeros que trabajan. Gracias a Dios mi familia siempre me ha apoyado, mi madre es fundamental, me ha permitido que yo me enfoque 100% en esto", afirma Silva.
Esa carrera por destacar se hace contra el tiempo. En la categoría la edad máxima permitida es 23 años. Cuando el plazo se acerca, se genera angustia, tensión.
"Hay muchos jugadores que están en su último año. Llega un momento en que dicen 'no se me está dando la oportunidad' y se generan encontrones en los partidos, no saben como reaccionar y se forman peleas. Es un tema de desesperación, por edad, hay muchos que tienen las condiciones pero no pueden seguir jugando", relata Silva.
El delantero fue campeón de Tercera A con Limache. Hizo el gol del título. Luego estuvo con el elenco tomatero en Segunda División Profesional, pero jugó menos de lo esperado y lo atormentaron las lesiones.
Este 2022 ha sido la mejor temporada de su carrera. Pero el inicio del año fue muy malo.
"No jugaba en Limache y para rematar falleció mi abuelita. Fue algo muy fuerte, no quería estar lejos de Santiago, me vine para estar con mi familia. Todo se juntó. A veces no te resultan las cosas. Hay que ser fuerte. Yo siempre trato de animarme, trato de confiar en mí. Cuando estaba en Segunda Profesional y tuvo que bajar a Tercera, nunca dudé, bajé para romperla. He tenido momentos difíciles. Puedo decir que son etapas de la vida. En la vida te vas a tropezar siempre y hay que levantarse sí o sí", declara.
Llegó a Colina con el torneo ya iniciado. En su primer partido anotó el gol del triunfo en los minutos finales y se emocionó pensando en su abuela Elvira.
Silva explica que no es un nueve de área puro. Le gusta entrar en la dinámica del equipo, asociarse con los compañeros.
"Me gusta el nueve de Colo Colo, (Juan Martín) Lucero. No es un jugador que vaya siempre a chocar, me gusta que se recoja, no trato de imitarlo ni me comparo, pero lo veo y me gusta. Yo juego con un estilo parecido, no soy nueve de área, porque no soy ni tan alto ni tan musculoso, pero llego al gol y entiendo el juego", apunta.
Silva se tomó unos días de descanso. No quiere saber de ofertas ni contratos por el momento. Pero sabe que tendrá que tomar una decisión. Trabaja para sea su momento. "Quiero seguir avanzando, quiero consagrarme, quiero más", cierra.
