Croacia quiere seguir soñando. Y motivos tiene de sobra. Viene de eliminar a Brasil, uno de los grandes candidatos, en cuartos. Y hoy tiene en sus manos la opción de llegar por segunda vez consecutiva a la final de un Mundial.
El sueño del seleccionado europeo en Qatar se sostiene en gran parte a su portero Dominik Livakovic, héroe en los penales ante el "Scratch" y Japón (octavos). Pero las bases de este equipo van más allá.
Si bien el meta del Dinamo Zagreb, y que suena en el Bayern Munich, es la gran figura, los pilares del equipo que dirige son otros tres jugadores: Luka Modric (37 años), Marcelo Brozovic (30) y Mateo Kovacic (28).
"Pasarles la pelota es más seguro que poner la plata en un banco", fue la frase del defensa Josip Juranovic, la más representativa de lo que significan los tres futbolistas para Croacia.
El DT Zlatko Dalic es aún más seguro de sus jugadores. "Tenemos el mejor mediocampo del mundo", sentenció.
Modric es el emblema de la selección. Lo que juega es impresionante, es el hilo conductor del equipo con un rol clave en ataque y defensa. A sus 37 años disputa su último Mundial y ha sido una de las sensaciones en Qatar.
Incluso, el talentoso mediocampista hasta ya vislumbra su futuro. Podría retirarse al final de esta temporada o en la siguiente. "Estoy disfrutando mi carrera como nunca, ya que nunca se sabe lo que puede durar este nivel. Sería un sueño retirarme en el Madrid", dijo hace unos meses.
Brozovic (Inter) y Kovavic (Chelsea) son el complemento perfecto para el volante del Real Madrid. Se entienden a la perfección y con justa razón, pues los tres disputan su tercer Mundial seguido. Y en Rusia 2018 fueron subcampeones. Allí, además, Modric fue elegido como el mejor del torneo.
"Cuando Brozovic, Modric y Kovacic están ahí nosotros controlamos el 90 por ciento del juego", indicó Juranovic. Ya anularon a Brasil en cuartos y ahora quieren hacer lo mismo con Argentina en la semifinal de Qatar que arranca a las 16 horas de este martes.