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Grandes noticias respecto al futuro recibió el fútbol chileno.
Tres promesas, dos de O'Higgins y uno de Universidad Católica, partirán al extranjero.
Primero se anunció la llegada del defensor central Sebastián Pino, nacido en la UC, al Alavés, escuadra de la segunda división española. Luego O'Higgins dio a conocer que Felipe Ogaz y Nicolás Matamoros serán enviados a préstamo al equipo Sub 20 del Fluminense de Brasil por todo el 2023.
Pino quien, a pesar de no haber debutado profesionalmente con la Universidad Católica, fue fichado hasta el 2026 por el Alavés, mismo club que hace algunos años contrató a Guillermo Maripán.
Además, es uno de los 23 nominados de la selección chilena Sub 20 para el Sudamericano de la categoría, es diestro y destaca su gran capacidad para anticipar jugadas y por su buen juego aéreo, favorecido por su estatura (1,95 metros).
Por otra parte, los jóvenes celestes llegaron por la misma vía a Fluminense Sub 20: a préstamo. Tras haber ganado el título de apertura del Torneo de Proyección con los rancagüinos, el club fue a Brasil a disputar la Copa Xerem, en la que participaron el Botafogo, Fluminense y Vasco da Gama.
Fue ahí cuando el volante Felipe Ogaz y el delantero Nicolás Matamoros llamaron la atención del Flu, que terminó enviando ofertas de préstamo por ambos, las que fueron aceptadas en Rancagua.
Respecto a su adaptación en Brasil, Victor Fuentes, entrenador de la categoría Proyección de O'Higgins, dijo: "No se les debería hacer difícil, van los dos, no va solo uno, que ahí podrían echar más de menos, extrañarían a la familia. Se van a hacer compañía y eso los va a fortalecer bastante".
Ogaz es el único de los tres que ha tenido experiencia en el profesionalismo e, incluso, anotó un gol en Copa Chile. Es zurdo y juega como volante mixto, aunque hasta la Sub 17 se desempeñó como lateral izquierdo.
"Felipe tiene muy buena pegada, sobre todo en los cambios de frente y balones detenidos. Para no ser tan grande tiene buen juego aéreo, pero su característica principal es que se posiciona muy bien dentro del campo de juego y da el equilibrio que se necesita", describió Fuentes.
En su caso, Matamoros es extremo y destaca por su velocidad, comparada a la de Francisco Arancibia, otro jugador de O'Higgins. "Termina muy bien las jugadas, sobre todo para tirar centros y, también, siendo extremo llega bastante al gol. También tiene un buen juego aéreo, con un rechazo impresionante", reseñó su ahora ex entrenador.