Sencillamente surreal. Pocas veces visto. El boxeador Marquis Williams debutaba en el peso mediano ante Márquez Greer.
El The Venue at Coosa Landig de Gadsden, Alabama, fue el recinto que vio cómo se daba un capítulo más que curioso en la historia de este deporte.
Williams, en una gran combinación con zurdazos y derechazos directos al plexo, logró derribar a Greer.
Fue en ese momento cuando, en vez de recuperarse y pararse, el magullado púgil vomitó ante la atónita mirada de los espectadores y el juez.
"Parece que está vomitando, estás hablando de un caso grave de indigestión", dijo un comentarista en la transmisión oficial. Greer con suerte pudo levantarse luego, tambaléandose.
"Increíblemente, Márquez Greer se arrodilló muy rápido, pero pareció vomitar al menos dos veces", publicó el The Sun.
Greer nunca ha ganado. Es su decimoquinta caída en fila para el natural de Tennessee. Catorce de ellas han sido por K.O.
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