En el duelo de ida de la Copa del Rey, el Barcelona derrotó a domicilio al Real Madrid, por 1-0, y sacó ventaja para clasificar a la final.
El único tanto del partido fue un autogol del brasileño Éder Militao, tras una desafortunada jugada.
El partido fue un monólogo de principio a fin. Desde el primer minuto fue el conjunto local el que se adueñó de la pelota, aunque en ningún momento fue capaz de profundizar y reflejar ese dominio en el marcador.
Recién en el minuto 20 el Barcelona logró pasar la mitad de la cancha. Pocos minutos después, tras un error en la salida del Real Madrid, Franck Kessié recibió de Ferrán Torres, se metió al área, tiró y apareció Thibaut Courtois. El balón dio en el arquero, pero el rebote pegó en la pierna de Militao, que corría con todo en dirección al arco, y terminó metiéndose (27'). Era el 0-1.
De ahí en más el conjunto catalán se acomodó en el Santiago Bernabéu, que veía como su equipo dominaba la pelota, pero no lograba penetrar una fortalecida defensa visitante.
Pasaron los minutos, pero el entrenador merengue Carlo Ancelotti no dio con la solución para empatar el partido. Hacia el final los culés terminaron jugando muy cerca del arco defendido por Marc-André Ter Stegen, pero nunca sufriendo en demasía.
Con este resultado,
los dirigidos por Xavi Hernández sacaron ventaja de cara al duelo de vuelta, a disputarse el próximo 5 de abril, en el Camp Nou.
Revisa el único gol del encuentro: