Perú atribuyó este lunes a las lluvias e inundaciones causadas por el fenómeno climático "El Niño costero" en el norte del país, el problema de infraestructura de obras que derivó en la decisión de la FIFA de retirarle la organización del Mundial Sub 17 de este año.
"El único inconveniente que hemos señalado (a la FIFA), y que es de conocimiento mundial, es que debido a las catástrofes naturales sería imposible intervenir los estadios Elías Aguirre y Miguel Grau en el norte del país", replicó el ministro de Educación Óscar Becerra, cuya cartera es responsable del deporte peruano.
Según la autoridad peruana,
el gobierno propuso que el torneo se juegue en Lima y Callao, el puerto vecino, pero su oferta fue descartada.
"Entiendo que la FIFA ha decidido priorizar el tema de que fuera en las ciudades de provincias y nosotros tenemos prioridades. Y la prioridad en este momento es atender al norte del país" afectado por las lluvias e inundaciones, agregó el titular de Educación.
La Federación Peruana de Fútbol (FPF) indicó en un comunicado que "la decisión se sustenta en los retrasos en el inicio de ejecución de obras de infraestructura deportiva", en el contexto del fenómeno climático.
La FIFA anunció este lunes que retira la organización del Mundial Sub-17 a Perú "por la incapacidad del país para cumplir con sus compromisos y terminar las infraestructuras necesarias para disputar el torneo".
El organismo rector del fútbol indicó que mantendrá sus fechas del 10 de noviembre al 2 de diciembre y que se nombrará un nuevo anfitrión "más adelante".