Tremendo escándalo. Por los cuartos de final de la Euroliga de baloncesto, el Real Madrid estaba perdiendo 80-95 con el Partizán. Sin embargo, el partido terminó antes de tiempo por una trifulca.
Quedaba un minuto con cuarenta segundos del último cuarto en el WiZink Center de Madrid. Kevin Punter, jugador del equipo serbio, manejaba la pelota y recibió una fuerte falta de Sergio Llul. Punter se fue encima de la estrella merengue y se desató la batalla campal.
Hubo empujones, puñetazos, jalones de camiseta, los que estaban en los bancos saltaron a la cancha. Guerschon Yabusele, ala-pívot del Madrid, tumbó a Dante Exum y lo golpeó en el piso. Lo tuvieron que aplacar entre varios para que lo soltara. Exum, en cambio, se fue al camarín con mucho dolor en el tobillo y asistido por sus compañeros.
Los árbitros se reunieron por más de diez minutos y decidieron dar por finalizado el encuentro. La Euroliga hasta ahora no ha dado a conocer las sanciones para los involucrados.
El diario español Marca tituló: "La derrota más negra en la historia del Real Madrid". "Los blancos dejaron escapar toda su frustración y acabaron a palos en un desenlace deplorable", añadió.
El Partizán quedó con una ventaja de 2-0 en la serie. Ambos equipos se volverán a enfrentar el próximo martes.
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