Otro polémico y triste episodio en el Campeonato Nacional. El clásico entre la U y la Católica se tuvo que parar a los 30 minutos del primer tiempo debido al lanzamiento de fuegos artificiales a la cancha.
En el Ester Roa Rebolledo solo hay hinchas azules. Los problemas con algunos fanáticos comenzaron mucho antes del pitazo inicial. La barra "Los de Abajo" publicó un comunicado en redes sociales denunciando que Carabineros le prihibió el ingreso de "elementos de animación".
"Teníamos todo preparado para armar una fiesta en Collao, pero las autoridades locales nos prohibieron el ingreso de todos los elementos de animación", expresó la barra.
"Trabajamos por 3 meses para realizar esto con rifas, campeonatos, campañas de recolección y aportes y Azul Azul ni siquiera hizo la gestión formal para poder ingresar la fiesta y el aguante de siempre a las galerías", agregó.
"Los de Abajo" no se detuvieron ahí y siguieron criticando el trato recibido y también a la dirigencia del cuadro laico.
"Nos citan temprano, pero solo para perder nuestro tiempo y mostrar su inoperancia. No les interesan los hinchas, nunca les ha interesado el club, juegan con el sentimiento de todo un pueblo, su intención nunca ha sido traer a la familia al estadio, su represión, sus malos tratos y sus decisiones totalmente arbitrarias, no solo no tenemos estadio sino que los dirigentes del club nos hacen sentir visita en todos lados", afirmó.
