Quizá surrealista queda corto. Los jugadores de los Dragons Catalans y St Helens tuvieron que escapar despavoridos cuando en pleno calentamiento para su duelo por la Superliga de rugby de Inglaterra irrumpió un toro.
Sí, un toro. Los rugbiers tuvieron que esquivarlo, en especial los de Dragons Catalans, ya que usaban una camiseta roja, que acapararon más la atención del animal.
Pero, ¿por qué había un toro? Esto ya que Bernard Guasch, propietario del equipo rojo, es también director de una empresa local de carne y había organizado un desfile de estos animales para celebrar la calidad de su carne.
Se anunció además que los tres toros premiados iban a dar una vuelta al campo durante el calentamiento, pero uno de ellos logró escapar para asustar a los jugadores y todo el público. Un cuidador terminó arrastrado por la cancha al intentar detener al animal, pero finalmente sí pudieron controlarlo sin que hubiera heridos.
Los Dragons ganaron 24-12 en un duelo marcado por un hecho surrealista.
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