Nicolás Jarry (53° ATP) se metió de lleno en el primer mundo del tenis mundial en 2023. Tras varios años complicados, luego del dopaje que lo dejó sin ranking en 2020, el chileno está rompiendo todos sus límites.
Este sábado, el chileno conquistó el ATP 250 de Ginebra, su segundo título del año y tercero de su carrera, tras vencer al búlgaro Grigor Dimitrov (33°).
Con esta victoria, Jarry será 35° del mundo este lunes, el más alto de su trayectoria profesional y se le abre un camino totalmente inesperado a principios de año cuando era 152° del orbe.
Ahora, el chileno será cabeza de serie en todos los ATP 250 que dispute, en la mayoría de los ATP 500 y también tiene opción de serlo en los Grand Slams, lo que abriría un camino más abordable en todos los certámenes que dispute.
Además, el dirigido por el español Juan Ozón tiene muchas chances de seguir subiendo en el ranking en la segunda parte de la temporada y soñar con meterse, al menos, en el Top 30. Hoy tiene 1.112 puntos y solo debe revalidar 202 en el resto del año.
Haciendo cuentas, actualmente el 30 del planeta es el estadounidense Sebastian Korda con 1.265 unidades. Es decir, está a solo 153 positivos de conseguirlo.
Ya pensando en algo más grande, en el Top 20, la tarea se ve más difícil, porque ese lugar lo ocupa el italiano Matteo Berrettini con 1.832 puntos.
Para atacar esos lugares, Jarry debe tener buenas actuaciones en Grand Slams y Masters 1.000, los torneos que reparten más unidades. La buena noticia es que el "Príncipe" prácticamente no tiene nada que defender por el resto de 2023 y casi todo lo que consiga será ganancia.
Es más, la primera raqueta nacional luce cuatro "ceros" en sus 18 torneos contables en el ranking orbital. Eso facilita mucho la tarea del chileno en lo que resta de 2023.
¿Qué viene para Jarry? Ahora enfrentará Roland Garros, segundo "major" del año, donde sumó apenas 16 puntos el año pasado al perder en la última ronda de la clasificación. Allí debutará este martes ante el boliviano Hugo Dellien.
Tras ello, el nacional irá a la gira de césped que acabará en Wimbledon. Previo al torneo más tradicional del circuito, se anotó en el ATP 250 de Stuttgart y en el ATP 500 de Halle, ambos en Alemania.
Si se mantiene sano y sin lesiones, el 2023 de Nicolás Jarry puede ser aún más grandioso.
