Tras alcanzar octavos en Roland Garros,
Nicolás Jarry (30°) ya se prepara para lo que serán sus próximos desafíos, con la gira de césped ya en marcha.
Y es que esta semana ya arrancaron los ATP 250 de Stuttgart y Hertogenbosch, torneos que se desarollan sobre pasto y que dieron el puntapié inicial a una serie de certámenes previos a Wimbledon (3 julio).
Si bien Jarry estaba inscrito en Stuttgart, se bajó para recuperar energías tras Roland Garros.
Luego de París, se tomó unos días de descanso, pero ya empezó a entrenar desde el sábado en hierba en Barcelona.
Volvería a la acción en Halle (19 junio) y luego disputaría Eastbourne (26 junio) antes de ir a la "Catedral" del tenis.
Sin embargo, considerando el nivel que ha tenido en arcilla: ¿Cómo se adapta el juego del chileno en el césped? Más, teniendo en cuenta que no juega en esta superficie desde 2019, hace cuatro años.
El pasto es totalmente distinto a la tierra batida. Es mucho más rápido, con un bote sumamente bajo y por ende, con puntos muy cortos.
Para Javier Frana, ex tenista argentino que fue 30 del mundo y reconocido comentarista, las sensaciones para el nacional deben ser positivas. Le tiene mucha fe.
"Yo creo que es muy auspicioso para él el césped. Él siempre tuvo hasta más potencial en el césped que en otras superficies, lo que pasa es que se juega mucho menos", comenzó comentando a Emol.
"Yo creo que es muy auspicioso para él el césped. Él siempre tuvo hasta más potencial en el césped que en otras superficies, lo que pasa es que se juega mucho menos"
Javier Frana
¿Por qué? "Por el servicio que tiene, porque volea bien, porque cuando sube es grande y puede cubrir mucho, porque desde el fondo de la cancha sus tiros pueden lastimar rápidamente y no necesita tirar a máxima velocidad para generar daño. Con el porte que tiene y salir a cerrar las jugadas es todo una amenaza para sus rivales".
Frana profundiza: "Siempre sentí que tal vez su gran, gran actuación o su gran, gran torneo posiblemente iba a llegar en césped. Él si logra conectar con el césped, es donde más peligroso puede llegar a ser. No necesita sacar a extrema potencia, con una velocidad buena promedio con el saque, se le va a hacer muy difícil a los adversarios quebrar, es decir, tiene muchas cuestiones y si entiende un poquito el césped y le agarra cariño, claramente que puede tener una muy buena parte donde juegue a partir de ahora".
Mariana Díaz Oliva, argentina ex 42 del mundo y comentarista de ESPN que cubre Roland Garros también ve con buenos ojos lo que pueda hacer Jarry en la gira de césped, aunque sí cree que debe adaptar algunos detalles.
"Al ser muy alto la pelota pica muy bajito en césped, va a tener que jugar con las piernas más separadas y bajar bien el trasero a la hora de golpear. Acortar un poco el recorrido de su derecha, que eso se adapta bastante, girar y golpear, como muchas veces hace en la devolución", dice a Emol.
Díaz Oliva también agrega que "el saque lo ultiliza muy bien él. Acá sirve más sacar con slice que más plano o fuerte, pero me parece que ahí no va a tener mayor problema. Creo que lo puede hacer muy bien, va a tener que tener mucha intensidad de piernas para moverse y lo bueno es que van a ser puntos cortos, que él suele tener muy buen rendimiento en puntos cortos así que para mí si logra meterse más abajo -porque es muy alto- puede llegar a tener muy buenos resultados".