Victor Wembanyama fue el número uno del draft 2023 de la NBA. El pívot francés jugará en San Antonio Spurs.
"Wemby" ha sido llamado de muchas formas. "Alienígena", "Unicornio", "Fenómeno". Hay una enorme esperanza depositada en él. Especialistas dicen que es el mejor prospecto de las últimas décadas y lo ponen a la altura de leyendas como LeBron James.
Pero aún debe demostrar su valía. No son pocos los jugadores que han sido los número uno del draft y que después han terminado siendo fiascos. Aquí te contamos de los casos más emblemáticos.
Anthony Bennet
Cleveland Cavaliers lo seleccionó en 2013 por delante de futuras estrellas como Giannis Antetokounmpo y Rudy Gobert.
El ala pívot venía de brillar con la Universidad de Las Vegas y se convirtió en el primer canadiense de la historia en ser número 1 del draft. Sin embargo, decepcionó.
En su primera temporada con los Cavaliers, promedió: 4.2 puntos y tres rebotes por partido. Su rendimiento no mejoró y Cleveland lo sacó del equipo. La carrera del basquetbolista en la NBA prosiguió en Minnesota, Toronto y Brooklyn. En ninguno de esos lugares brilló. En total, jugó apenas 151 partidos en sus cuatro años en la mejor liga de basquet del mundo.
Bennet dejó Estados Unidos y jugó en Europa. Con el Fenerbahce fue campeón de la Euroliga. Intentó regresar a la NBA, pero una lesión de rodilla impidió que firmara con Houston. Actualmente se desempeña en Taiwán.
Kwame Brown
Elegido por los Washington Wizards en 2002. Fue el primer número uno del draft que llegó a la NBA directo desde High School (secundaria).
En Washington le fue mal. Dicen que tuvo una pésima relación con Michael Jordan. Se habría sentido intimidado por "Mike".
En 2005 fue traspasado a Los Angeles Lakers. Dejó mucho que desear en la franquicia oro y púrpura. También en Memphis Grizzlies, Detroit Pistons, Charlotte Bobcats, Golden State Warriors y Filadelfia 76ers.
A su bajo nivel le sumó varios escándalos fuera de la duela. Protagonizó incidentes callejeros y lo acusaron de violación. En dos ocasiones fue detenido por posesión de marihuana.
Michael Olowakandi
Los Angeles Clippers se hicieron con él en 1998. Con el paso del tiempo, se puede decir que fue una pésima decisión. Esa temporada eran elegibles Vince Carter, Dirk Nowitzki o Paul Pierce, tres jugadores que ahora son miembros del Salón de la Fama.
El pívot nigeriano llegaba a la liga respaldado por grandes estadísticas con la Universidad del Pacífico. Sin embargo, en el basquet profesional no estuvo ni cerca de ser una estrella.
Olowakandi estuvo diez temporadas en la NBA. Jugó para Clippers, Timberwolvez y Celtics. En 500 partidos, promedió 8.3 puntos, 6.8 rebotes y 0,7 asistencias.
Greg Oden
En 2007 Portland seleccionó al gigante Oden, que venía de ser el interno más dominante de la NCAA.
Sin embargo, las lesiones arruinaron al centro. Antes de comenzar su primera temporada, se lastimó la rodilla.
Recién pudo volver a jugar en 2008 y dejó destellos de calidad. Pero volvió su calvario con las lesiones. Primero el pie, luego la rodilla izquierda.
Sus problemas físicos le impedían jugar y lo afectaron mentalmente. Se excedió con el alcohol y las pastillas para dormir. Recaló en Miami el 2014 y después tuvo un breve paso por China. Se retiró con 28 años. "Fui la mayor decepción en la historia del draft", afirmó hace un tiempo.
