Este domingo se corre el Gran Premio de Las Vegas donde
Max Verstappen, ya campeón de esta temporada y monarca por tercera vez consecutiva, buscará otra victoria para seguir aumentando su palmarés.
El tema es que parece que al neerlandés no le gusta mucho el circuito. O al menos eso se desprende de sus ácidas declaraciones acerca de la pista y el ambiente.
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Para ser sincero, no me produce demasiadas emociones. Sólo quiero centrarme en el aspecto del rendimiento y no me gustan todas las cosas que hay a mi alrededor. Sé que son parte de ello, pero no me interesa. Es", comenzó diciendo en la conferencia con un tono algo molesto.
Pero Verstappen siguió: "No es muy interesante (dice en referencia al circuito), y sólo quiero hacerlo lo mejor que pueda. En realidad no es lo mío. Si me gusta o no, no depende de mí, pero no voy a fingir".
El neerlandés insistió con una sinceridad brutal: "Simplemente estoy expresando mi opinión sobre las cosas positivas y negativas, y así soy. A algunas personas les gusta un poco más el programa (del fin de semana), pero a mí no me gusta nada. Crecí sólo mirando el lado del rendimiento, y así es como yo también lo veo. Me gusta estar en Las Vegas, pero no tanto para correr".
Finalmente, Verstappen cierra con una conclusión que no deja dudas: "Es un 99% espectáculo y 1% evento deportivo. Para mí, puedes saltarte todo este tipo de cosas. Simplemente estás ahí parado, pareces un payaso".
