Desde antes se sabía que el partido de este jueves en el Monumental
era clave para Chile. Enfrentaba a Paraguay, rival directo en la lucha por cupos al Mundial.
Urgía un triunfo y
solo consiguió un doloroso empate sin goles. Sí, doloroso, porque
no pudo aprovechar el haber jugado casi un tiempo completo con un jugador más. A los 43' del primer parcial, el juez del partido expulsó a Robert Rojas tras una brutal patada a Gabriel Suazo que vio el VAR.
Después de una primera parte con problemas para llegar al arco guaraní,
el hombre más hacía ilusionarse con un segundo lapso favorable al elenco de Berizzo.Pero no fue así.
Chile se fue enredando con el cerrojo paraguayo, tenía el balón, pero sin claridad para crearse ocasiones. La más clara la tuvo Erick Pulgar con un disparo de media distancia.
No resultó la apuesta con Alexis de enganche y Damián Pizarro que sucumbió con los centrales forasteros; Menos pudo aportar Ben Brereton que terminó saliendo en el segundo lapso.
Berizzo intentó con los cambios. Mandó a la cancha a Aravena, a Loyola, Guerrero, pero nada hizo cambiar la historia.
Para más,
a los 87' Víctor Felipe Méndez se fue expulsado, dejando a ambos equipos con 10 jugadores.
A esas alturas ya había poco que hacer. Chile sigue enredado, no encuentra un juego que entusiasme y
la gente despidió al equipo pifiando y pidiendo la salida de Berizzo.
La "Roja" hoy está fuera de todo y se viene el duro Ecuador en Quito...