Francisco Cerúndolo, Nicolás Jarry y Sebastián Báez.
Agencias/Emol
Nicolás Jarry terminará el año en el puesto 19 del ranking mundial, erigiéndose como el mejor sudamericano posicionado. Esto, fruto de una temporada realmente brillante.
Justamente el chileno
también lidera una marca histórica para el tenis sudamericano y que no ocurría desde 2007.
Sí, porque por primera vez en ya 16 años, cuatro tenistas de esta parte del continente terminan entre los 30 mejores de escalafón.
Luego de Jarry, destacan los argentinos Francisco Cerundolo (21°), Sebastián Báez (28°) y Tomás Etcheverry (30°), quienes también cierran la temporada con balances muy positivos.
El nacional ganó los ATP de Santiago y Ginebra, Cerundolo triunfó en Eastbourne, Báez se coronó en Córdoba, Kitzbuhel y Winston-Salem y Etcheverry, pese a que no ganó títulos, llegó a las finales de Santiago y Houston y fue cuartofinalista en Roland Garros.
Un tremendo número para el tenis sudamericano. ¿Quiénes lo habían logrado en 2007?
También un chileno era protagonista y le seguían jugadores trasandinos. En esa ocasión, incluso, eran cinco dentro del top 30: Fernando González (7°), David Nalbandian (9°), Guillermo Cañas (15°), Juan Ignacio Chela (20°) y Juan Mónaco (23°).
En 2008, eso sí, fue la última vez que Sudamérica brilló y tuvo tres top 15: Juan Martín del Potro (9°), Nalbandian (11°) y González (15°). ¿Se podrá igualar esa marca en el corto plazo?
