No fue fácil llegar a un acuerdo para que Arturo Vidal regresara a Colo Colo. Lo que en un momento parecía una negociación que corría sola, se complicó demasiado y en más de un momento estuvo caída.
Incluso cuando el jueves en la noche parecía todo ya listo para la firma, las conversaciones no avanzaron y
el "King" estaba más fuera que dentro del Monumental.¿Qué pasaba?
La piedra de tope era el plazo del contrato. En Blanco y Negro, y específicamente en el bloque Vial, no estaban de acuerdo en dos años de contrato. "Si queremos ser un club serio no podemos hacer contratos millonarios por más de una temporada", recalcaban.
¿Y entonces? Fue el ex volante del Bayern Munich, la Juventus y Barcelona, entre otros, que
cedió y aceptó firmar solo por un año, revisable de acuerdo a sus números.Los deseos de Vidal de regresar a Macul fueron claves para que tomara la decisión de permitir estampar su rúbrica nada más que por el 2024. Además, Aníbal Mosa fue fundamental, porque llamó insistentemente al jugador para que aceptara.
El bicampeón de América dio el sí definitivo a ese ítem y al
millón 200 mil dólares que ganará por la temporada y que lo convertirá en el jugador mejor pagado de Chile.
"Queríamos dos años, pero
aceptamos uno, porque era eso o no había acuerdo. Era el gran sueño de su vida, privilegió eso antes que otra cosa", dijeron desde el entorno del mediocampista a El Mercurio.
¿Y ahora qué viene? Debe pasar los exámenes médicos, algo que aún mantiene en alerta a parte de la directiva alba. Luego de eso, firmará su retorno, algo que podría ocurrir este propio sábado.