Alexis Sánchez fue clave al iniciar la jugada del gol con el que el Inter de Milán derrotó por un agónico 1-0 al Napoli y conquistó el título de la Supercopa de Italia.
Con eso, el delantero chileno dejó, también, atrás las duras críticas de la prensa italiana, que esta semana ha llenado de elogios al goleador histórico de la "Roja".
Este jueves, Il Giorno se sumó a las loas, al publicar: "Aceptó regresar a pesar de saber que tenía que empezar muy atrás en la jerarquía, que nunca había entrenado en un grupo durante los meses de verano que pasó como agente libre y que tenía ofertas en Arabia Saudita que siguen haciéndole cosquillas".
"Incluso su gran amigo Vidal le aconsejó públicamente que dejara el Inter y tomara el avión a destinos donde seguramente tendría más espacio.
Pero Sánchez, como decía su compatriota, es testarudo. Y un ganador. Prefiere quedarse donde juega y gana menos, pero sabe que aún puede ganar trofeos prestigiosos,
contribuyendo en los pocos espacios que tiene", añadió el citado medio.
Además, agregó: "En la final de la Supercopa de Italia le dieron nueve minutos para intentar evitar la inminente tanda de penales. Lo hizo, colocándose como centrocampista ofensivo detrás de Lautaro y Arnautovic, moviendo el balón con mayor fluidez en un momento en el que sus compañeros golpeaban el muro levantado por el Napoli. Con métodos y tiempos adecuados sirvió a Pavard en el pasillo de la derecha de donde llegó la asistencia ganadora para el 1-0".
Pero también se refirió a la posibilidad de que el tocopillano renueve contrato en el cuadro lombardo: "El excelente impacto en la Supercopa, una repetición de lo ocurrido en 2022 cuando el chileno marcó en el minuto 120 ante la Juventus el gol que entregó el primero de cinco trofeos a las manos de Inzaghi, poco cambiará respecto a su futuro lejano, pero podría tener una buena influencia en el más cercano".
"Sabe muy bien que Taremi llegará casi con toda seguridad en verano y que es el único delantero cuyo contrato está a punto de finalizar. Para convencer a los directivos de que lo retuvieran, tendría que obrar un milagro. No escatimará esfuerzos: en el ADN de los ganadores, cada partido es una batalla por conquistar, incluso a los 35 años y sin nada que demostrar", sentenció.
