Molesto, muy molesto terminó Gustavo Álvarez tras la derrota del pasado sábado de la U ante Católica por el Torneo Nacional (1-2). Y no fue precisamente por el resultado.
El DT acusó que se le ocultó la lesión de Ignacio Tapia, quien sufrió problemas físicos en el calentamiento y quedó fuera solo a minutos de empezar el partido.
Ya con el paso de los días, el técnico profundizó en su enojo y fue muy claro en su mensaje.
"Ratifico cada palabra que dije el sábado, hablamos puertas adentro las cosas a mejorar, como organización sana. Ahora el tema está solucionado, pensando en Ñublense, pero ratifico lo que dije el sábado", dijo este jueves en conferencia de prensa.
Su reflexión siguió: "Las personas se pueden equivocar. Lo importante es no reincidir en el error. Son jóvenes que se pueden equivocar, eso desde el punto de vista personal. Después desde lo deportivo deben ganar su lugar".
Álvarez también se refirió a los vulgares gestos de Nicolás Castillo. tanto en cancha como en las redes sociales.
"Nosotros los protagonistas tenemos que ser muy cuidadosos. Hay que ser cuidadosos porque la exposición provoca que tengamos que tener una conducta ejemplar", expresó.
"Me parece una falta de respeto absoluta, totalmente repudiable y que seguramente será sancionado por quien corresponde. Independientemente de los colores, el fútbol tiene que ser una expresión social que marque un camino", cerró.
La U, líder del fútbol chileno, enfrenta este domingo a Ñublense desde las 17:30 horas.
