Nuevo escándalo en el fútbol. Ahora en el torneo juvenil de selecciones, L'Alcúdia, donde jugaban Argentina y Mauritania.
El partido ya estaba en su recta final cuando el árbitro cobró un polémico penal a favor de la "Albiceleste". A los jugadores africanos no les gustó la sanción y le reclamaron con todo al juez.
Pese a las quejas,
la pena máxima se ejecutó y el cuadro transandino logró el empate ya cuando el encuentro se iba y se jugaban los minutos agregados.
Mientras los argentinos festejaban, los futbolistas de Mauritania se fueron contra el árbitro totalmente furiosos por la decisión que los privó de la victoria y dejó el lance 1-1.
Fue a tal punto la rabia, que tuvo que intervenir la Guardia Civil para que el cuerpo arbitral se fuese de la cancha escoltado hasta la zona de vestuarios.
Recordar que este miércoles Argentina fue parte de un papelón en los Juegos Olímpicos. Su partido fue suspendido por más de una hora, cuando volvió le anularon el gol en el VAR y terminó perdiendo ante Marruecos.
