SANTIAGO.- Falabella criticó con dureza a las firmas de comercio electrónico internacionales por "competencia desleal", siendo la primera gran firma en formular reclamos abiertos por la diferencia que a su juicio hay sobre las obligaciones regulatorias en el país.
"Lo que no está incluido en el proyecto (del Sernac) es el comercio internacional desleal.
La tecnología ha permitido acceder a un consumo desregulado y, a lo que me refiero con eso, es que cualquier persona a través de su computador puede comprar, las empresas no pagan impuestos y el Sernac en esto no ha hecho nada", afirmó Gonzalo Smith, gerente corporativo de Asuntos Legales y de Gobernanza del retailer, durante el foro "Reforma a la ley del consumidor", organizado por Icare, publica
Diario Financiero.
El comercio electrónico en Chile ha sostenido un marcado crecimiento en los últimos años, siendo impulsado por compañías internacionales como Aliexpress y Wish.
El ejecutivo aseguró que este tema fue planteado, pero "la agenda no incluye ninguna opinión de las empresas" y añadió que en "en el caso del impuesto, se podría haber hecho el cargo a las tarjetas de crédito operadas desde Chile, en transacciones remotas u operaciones de comercio hechas en el extranjero".
"Todo esto produce el problema de competencia desleal. Nosotros en Falabella tenemos más estándar frente a pequeñas empresas y sin embargo, no tenemos ninguna excepción para no cobrar IVA en las transacciones de menos de US$100", agregó.
Smith enfatizó que el problema es actual y real "que atenta contra la innovación, hay que solucionarlo y de esto en el proyecto no tiene nada".
"Las grandes tiendas han traído muchos beneficios para los consumidores chilenos (...)Pero la reacción ilustrada en el artículo respecto del e-commerce solo anuncia el principio del final. O lo asumen y lo adoptan o pasarán a la historia como Kodak, Nokia, etc.
Francis Vial #ComentaristaNuevo
Por último, sostuvo que frente a esta nueva regulación del Sernac, que hoy sería votada en Sala del Senado, el consumidor queda desamparado. "No se trata de caridad, sino de derechos garantizados", dijo.
"Tenemos que regular pensando en lo digital, no en lo analógico. Necesitamos política públicas de carácter digital y, además, hay que saber entender el oportunismo del consumidor, porque precisamente este mundo digital lo que ha hecho es expandir la posibilidad de que se produzcan transacciones en números y en profundidades que nunca habían ocurrido", finalizó.