NUEVA YORK.- El escritor estadounidense E.L. Doctorow, famoso por sus obras de ficción históricas, entre ellas "Ragtime", "Billy Bathgate" y "The March" (La Gran Marcha), falleció el martes a los 84 años.
Según anunció su hijo, Richard Doctorow, al "The New York Times", E.L Doctorow murió en un hospital de Nueva York a consecuencia de un cáncer de pulmón.
"E.L. Doctorow era uno de los más grandes escritores estadounidenses. Sus libros me enseñaron mucho, lo extrañaremos", tuiteó el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
El escritor, que nació en el barrio neoyorquino del Bronx en el seno de una familia judía de ascendencia rusa, manejaba una pluma audaz y poco convencional, lo que le dio una reputación de creativo experimentador.
A lo largo de una carrera de seis décadas escribió una quincena de novelas, desde obras de ciencia ficción hasta aventuras del oeste y policiales, así como numerosos artículos.
Cada obra partía de diferentes hechos con elementos de ficción que daban a esos acontecimientos una nueva dirección.
Edgar Lawrence Doctorow estudió en el Kenyon College de Ohio y más tarde hizo un posgrado en arte dramático en la Universidad de Columbia, donde conoció a quien sería su esposa, Helen Setzer, con quien tuvo tres hijos, un varón y dos niñas.
Tras trabajos transitorios y luego en el mundo editorial, Doctorow publicó en 1960 su primera novela, "Welcome to Hard Times" (El Hombre Malo de Bodie), ambientada en el lejano oeste.Luego, en 1966, llegó "Big as Life", que se inspiró en la ciencia ficción. En 1971, publicó "The Book of Daniel" (El Libro de Daniel), una ficción en torno a la pareja Rosenberg. Mientras que en 1975, lanzó "Ragtime", la cual fue llevada al cine por Milos Forman, trata de un músico negro victimizado por el racismo.
En "The March", Doctorow relata la marcha del general de la Unión William Sherman desde Atlanta a Savannah hacia el final de la Guerra Civil.
Con "Billy Bathgate", otra importante novela publicada en 1998, el autor explora el mundo del crimen organizado durante los años 1920 y 1930 en Estados Unidos.
En una entrevista con el diario "Los Angeles Times", Doctorow explicó el arte de hablar a través de los temas de su ficción. "Cada libro tiene su propia voz", dijo entonces.
"Creo que hay una especie de ventrílocuo cuando escribo. Nunca quiero escuchar mi propia voz, eso sería lo peor que podría pasar", agregó.
El año pasado, Doctorow se llevó el premio literario del Congreso estadounidense (Library of Congress Prize for American Fiction). Antes, había recibido entre otros galardones un National Book Award, tres National Book Critics Circle Awards y dos PEN/Faulkner Awards.