Brown vuelve a sonreír. El cantante continuará con su gira por Asia.
AP
SANTIAGO.- Tuvo que suplicar a las autoridades locales y hasta lanzar un grito de auxilio al Presidente Barack Obama, pero finalmente no fue necesario que éste fuera a su rescate. Chris Brown podrá abandonar Filipinas, poniendo fin a una teleserie que se extendió por varios días.
El cantante había estado retenido en el país, acusado por supuestos incumplimientos de contrato por parte de la Iglesia de Cristo, una influyente organización religiosa conservadora.
Según ésta, el ex de Rihanna debía ofrecer un concierto el 31 de diciembre de 2014 en la Philippine Arena, un gran estadio cubierto del que son propietarios.
Aprovechando la reciente visita del artista al país, la iglesia retomó su ofensiva legal, y consiguió que Brown permaneciera retenido tres días sin poder irse, mientras era indagado por la justicia.
Chris Brown mostró estupefacción —"ésta es una situación muy seria, alguien tiene que ser el responsable por mezclar mi nombre con todo esto. No he hecho nada malo", comentó en Twitter—, pero luego lanzó incluso peticiones al mandatario de su país para que lo ayude.
"Por favor, por favor, déjanos ir, por favor", dijo de rodillas en un video que publicó en Instagram y que más tarde retiró, bajo el título "OBAMA!!!!!!!!!!".
El fin de la miniserie de tres días llegó a su fin luego de que las autoridades aprobaran su salida, que se materializaría este viernes, dijeron desde inmigración. De todos modos, las investigaciones en torno al caso continuarían abiertas.