Grohl en el "trono". Mientras se recupera de una fractura, el músico debe tocar sentado.
AFP
SANTIAGO.- Dave Grohl debería estar en cada show cabeceando de extremo a extremo del escenario, o acercándose corriendo al público sobre una pasarelo, mientras ejecuta cualquiera de los incendiarios riffs en el repertorio de Foo Fighters.
Pero no, no ha podido. Tras sufrir una fractura de pie hace algunas semanas, el líder de la agrupación norteamericana tuvo que inventar todo un despliegue que le permitiera tocar sentado. Un aparatoso asiento al que hoy llama "el trono".
Aunque con lo que seguramente Grohl no contaba, era con que el famoso "trono" terminara transformándose en pieza angular del espectáculo con que el grupo gira hoy por el mundo. Tanto, que pese a tener su excusa en su enyesado pie, el cantante y guitarrista no tiene demasiado apuro en finalizar su experiencia con el asiento.
Según Grohl, la silla se ha transformado en "la estrella del show", dijo al Hollywood Reporter, medio al que reconoció no tener claridad respecto del momento en que esté listo para volver a actuar sobre sus dos pies.
"¿Dejaré de usarlo cuando me pueda parar? ¿O dejaré de usarlo cuando pueda saltar y correr como solía hacer? ¿O lo mantendré por fucking siempre?", se preguntó el ex Nirvana.
El asiento en que Grohl se presenta actualmente es una enorme silla coronada con la insignia del grupo, rodeada de luces y guitarras, y con soportes para líquidos y para que el músico mantenga en alto su pie mientras canta y toca la guitarra.
La banda debió acudir a esa técnica luego de que su líder se fracturara un pie durante una presentación en Suecia, en junio de este año. Pese a la dolorosa lesión, el cantante continuó con el show. "Creo que me rompí una pierna", dijo en pleno escenario, sentado en una silla.