Fernando Paulsen lamento que se pusiera fin a la decisión de que "sin importar quien fuera el dueño (de la estación), el programa editorial top de la televisión chilena tenía que seguir siempre".
El Mercurio
SANTIAGO.- "Uno de los riesgos que existen en televisión, cuando los propietarios de los canales son extranjeros, es que no son capaces de dimensionar la importancia que tienen programas de opinión de impacto local", dice el periodista Fernando Paulsen, quien en conversación con Emol lamentó el fin del programa que condujo hasta mayo pasado, "Tolerancia Cero".
El profesional, que renunció tras la salida de Jaime de Aguirre de Chilevisión, siente que la decisión tomada en torno al espacio periodístico por el nuevo director ejecutivo Francisco Mandiola y su asesor alemán, Holger Roost-Macías, es un reflejo de lo que será su gestión al mando de la estación.
"La persona encargada de asumir la conducción del canal, y me estoy refiriendo al director ejecutivo real y no al 'palo blanco' que pusieron para cumplir con la ley chilena que dice que debe ser un chileno el director ejecutivo (en alusión a que sería Roost-Macías y no Mandiola quien comanda la señal), tiene urgencias vinculadas con generar cambios en la situación económica de CHV y no con consolidar o mejorar los programas que hay", comenta con pesar.
Ahora que se confirmara la salida de pantalla de "Tolerancia Cero", Paulsen siente que la medida termina por "romper con una decisión que se mantuvo desde que Jaime De Aguirre llegó a la dirección ejecutiva: Que sin importar quien fuera el dueño (de la estación), el programa editorial top de la televisión chilena tenía que seguir siempre... y sin importar tampoco los ciclos de rating que venían".
Bajo ese argumento, el periodista es enfático en afirmar que "ese criterio fue el que cambió, porque no se defienden los programas editoriales desde el punto de vista de lo que significan editorialmente para el canal, y lo lamento mucho".
Fernando Paulsen recordó que "cuando decidimos cambiar el programa del domingo en la mañana a la noche, fue una decisión que necesitó un coraje televisivo gigantesco... nadie decide algo así, si lo que quiere es ganar plata. Lo que nosotros queríamos es que las personas, en horario nocturno, tuvieran acceso a un intercambio de ideas sobre lo que pasa en el país y en el mundo para comenzar la semana con la mejor información. Esa fue una decisión editorial de canal, no comercial, y Jaime (De Aguirre) la mantuvo por 15 años".
"El método ensayo y error"
Para el periodista, el fin de "Tolerancia Cero" es una determinación que la plana mayor de la señal propiedad de Time Warner tomó pensando únicamente en términos financieros.
"El director ejecutivo real (nuevamente aludiendo a Roost-Macías) tiene 14 o 15 meses para cambiar la condición económica del canal, y cuando ese es el mandato, los métodos con los cuales lo haces son irrelevantes. No tienes por qué proteger algo de 16 años si no te da los números que tú deseas ver. No tienes por qué considerar que el área dramática o los noticieros deben ser como son, si tú crees que debe ser de otra manera", explicó, añadiendo que cree que en la búsqueda de mejorar el estado financiero de CHV los ejecutivos "lo van a hacer con el método de ensayo y error, como lo hicieron con 'Tolerancia Cero' hasta ahora".
Paulsen afirma no conocer a la nueva plana ejecutiva, pero advierte que desde que arribaron "entendí que si nombraban (desde Time Warner) a un extranjero como director ejecutivo real, es porque la lógica local no era relevante. Y cuando eso pasa, de un día para otro te puedes encontrar con un programa terminado o el canal vendido".
El comunicador bien sabe de esto, pues recuerda que era el director de prensa de La Red cuando la señal pasó a manos de la compañía estadounidense Canwest, que tras su llegada cerró el área y eliminó gran parte de los programas en vivo, aplicando una lógica norteamericana que privilegiaba las series y películas. "El resultado en el corto plazo fue que Canwest tuvo que vender su participación y salir del país, después de no tener éxito", rememora.
Fue esta experiencia la que, revela, lo llevó a conversar el asunto con Jaime de Aguirre tras el arribo de Time Warner. "Le dije que tenía el fantasma de que cuando los extranjeros vienen a comprar un canal que para ellos es un lunar, lo que se pierde es que deja de estar el dueño local que entiende lo valioso del programa local de opinión, independiente si por él gana lucas o no".
Sobre lo que viene para su ex casa televisiva, el periodista indica que "entiendo que Holger es extraordinariamente competente, que en europa ha demostrado amplio conocimiento de televisión", pero evidencia recelo respecto a lo que será su gestión porque "llegó a un país en que hay ciertas valoraciones distintas a otros países respecto a los programas de opinión y en vivo", como "Tolerancia Cero".