SANTIAGO.- Hace diez años atrás la actriz Ellen Page y el director David Slave pusieron sobre la mesa el tema de la pedofilia en "Hard Candy". Allí la canadiense dio vida a una adolescente que, tras conocer a un pederasta por internet (Patrick Wilson), decide reunirse con él para atacarlo y así impedir que vuelva a acechar a otras jóvenes.
Una década después el cineasta estadounidense Eli Roth ("Hostal") plantea una idea similar en "Knock knock, seducción fatal". En esta cinta —rodada en Chile junto a la productora de Nicolás López, Sobras— Keanu Reeves interpreta a Evan, un arquitecto cuarentón que se convierte en víctima del perverso y enfermizo juego sexual de dos atractivas adolescentes. La española Ana de Armas y la esposa del director, la chilena Lorenza Izzo, encarnan a la dupla antagónica.
El objetivo de las muchachas es seducir a hombres con matrimonios estables y familias felices, para luego convertirse, intencionalmente, en una pesadilla en la vida de estos individuos. La idea es que los tipos valoren lo que tienen y se den cuenta de que jamás deben engañar a sus esposas, y menos con menores de edad. El personaje de Reeves es una presa ideal, pues está casado con una bondadosa mujer (Ignacia Allamand) y tiene dos hijos.
La película se grabó el año pasado en Chile, pese a estar ambientada en las costas de California. El director cuenta que lo hizo así porque "todo nuestro equipo de producción estaba en Santiago. Desde un inicio se diseñó todo pensando en que rodaríamos en Chile", dice al teléfono desde su oficina en Los Angeles.
El también actor de "Bastardos sin gloria" tiene una estrecha relación con el país. Es yerno de la modelo Rosita Parsons y hace tres años comenzó a trabajar con Nicolás López en varios proyectos. Juntos han hecho "Aftershock", "Caníbales", "La maldición" y ahora "Knock knock".
"Los chilenos son muy creativos y aperrados. Creo que debido a la ubicación geográfica en la que están, se las ingenian de manera muy inteligente para hacer cosas, concretar proyectos. Muchas cosas que en Hollywood nadie pensaría hacer, allá las hacen. Por ejemplo, la película 'Qué pena tu vida' se grabó sin cámaras de estudio, y logró estrenarse en salas comerciales. Acá no se les ocurriría", dice.
Roth explica que siempre quiso que "Knock knock" fuera grabada en Chile junto a "una gran estrella" como Keanu Reeves. El canadiense —que se caracteriza por participar tanto en megaproducciones como en cintas de bajo presupuesto— se sumó rápidamente al proyecto.
El realizador cuenta que este mes ha sido bastante ajetreado para él, pues al estreno internacional de "Knock Knock" se suma el debut de "Caníbales" en las salas norteamericanas. La cinta será lanzada el próximo 26 de septiembre bajo la distribución de Universal Pictures.
A esto se suma, además, la preparación de "Meg" junto a Warner Bros. Este thriller se centrará en lo que experimentan los viajeros de un submarino cuando accidentalmente se encuentran con un tiburón blanco de grandes proporciones que, supuestamente, estaba extinto.
"Estamos hablando de un tiburón gigante, así es que hacer esa película será muy, muy divertido. Sé que implicará mucho trabajo, por eso ahora estamos preparando todos los detalles en el guión, para que todo salga bien, señala al referirse al proyecto de más de 100 millones de dólares que estrenará en 2017.
A continuación el tráiler de "Knock Knock: seducción fatal".