Fans a la espera de ingresar a la zona Diamond, la más cercana al escenario. Según estimaciones de Carabineros, en las puertas para Galería y Cancha, entre otras localidades, las aglomeraciones a esta hora son mayores.
Sebastián Cerda
SANTIAGO.- Un sol primaveral arrecia a esta hora sobre Santiago. Muy grato, probablemente, para quienes salen de sus oficinas a tomar un poco de aire, o para quienes realizan sus actividades cotidianas caminando breves trayectos por las calles de la capital.
Pero para quienes han optado por pasar estas horas a pleno sol, sin un centímetro de sombra que los resguarde, y en una zona donde en metros a la redonda no se ve algo que no sea cemento, sin dudas que la sensación es otra.
Es lo que sucede con los fanáticos extremos de Rihanna, cantante barbadense que
esta noche se presenta en el Estadio Nacional, en cuyos alrededores en estos momentos ya hay más de dos mil personas aguardando la apertura de puertas, programada para las 17:00 horas.
La gran mayoría de ellas llegó hoy, pero hay un buen número de fanáticos
que arribó al recinto de Ñuñoa con días de antelación, incluso cinco, de acuerdo con los organizadores. Anoche, en tanto, se calcula que fueron cerca de 150 los que durmieron en el recinto, que por primera vez abrió sus rejas para permitirles pernoctar en sus terrenos. Las noches anteriores, fue la calle la que los acogió.
Por ello, la respuesta de los más sacrificados ante la pregunta "cómo están" es escueta: "Mal", dicen, desparramados en el suelo, apoyados unos sobre otros y en sus propias mochilas, rodeados de botellas de agua y envases de alimentos.
Sin embargo, su semblante cambia cuando proyectan lo que está por venir, ese encuentro con su ídola, prácticamente cara a cara. Esto ya que, según sus cálculos, los 100 primeros lograrán uno de los anhelados espacios en la reja que separa el escenario de la ubicación Diamond, y a la que se aferrarán apenas tengan oportunidad.
Para sobrellevar este período, la organización ha sido clave. Sólo de ese modo, y reunidos en grupos de aproximadamente diez personas, han podido realizar turnos, que les han permitido ir y volver desde sus casas, e incluso desplazarse hacia el aeropuerto y el hotel W de Las Condes (donde se hospeda la cantante), sin perder sus lugares.
Para esta noche, en tanto, no sólo esperan ser testigos de un buen número, sino además participar con "al menos cuatro sorpresas", según adelanta el presidente del club de fans de Rihanna en Chile, Francisco Bernal.
Entre ellas, está el objetivo de ver a todo el estadio agitando globos de derecha a izquierda en la canción "Stay", desplazar hacia el escenario billetes con la cara de la artista en el reciente single "Bitch better have my money", y exhibir imágenes con el rostro de su fallecida abuela Dolly cuando sea el turno de "Diamond".