El boricua recibió antes del show un Disco de Platino por las ventas de su álbum "En todo estaré".
Juan Eduardo López, El Mercurio
SANTIAGO. - Es que era imposible que las defraudara. Chayanne es el artista que definitivamente sabe cómo deleitar a su público, y es que no necesita nada más que sus canciones, su carisma y sus caderas para que las chilenas caigan rendidas a sus pies.
El puertorriqueño presentó esta noche el primero de sus seis shows en el Movistar Arena en el marco de su gira "En todo estaré"-con esto igualó en el récord de presentaciones a Ricardo Arjona y Violetta, aunque es el único que las hace de manera consecutiva- y demostró una vez más que es la imagen de la combinación entre sencillez, calidad y sensualidad.
Frente a un público que un 99,9% estaba compuesto por mujeres salió a escena a las 21:30 horas en punto. Desde ahí todo fue un constante coqueteo y compartir con sus fans, entregándoles exactamente lo que ellas esperaban.
Con sus clásicas baladas como "Si tu te vas" y "Lo dejaría todo" y sus nuevos éxitos como "Humanos a Marte" y "Bailando dos corazones" -con ritmos más urbanos como bachata y reggeaton- encantó a las mujeres con las canciones que como él mismo dijo "sonaban en su primer beso y en otras situaciones que no voy a nombrar porque hay menores de edad".
Su sencillez es otra de la claves de su éxito, vigencia y complicidad con el público. Además de recibir cada uno de los regalos e incorporarlos en sus coreografías, en un acto que él mismo calificó como "espontáneo y necesario" saltó a la platea para abrazar a sus mujeres. Se sacó una selfie con un teléfono de una asistente y besó cada una de las manos que aquellas que cumplieron con tocarlo.
A sus 47 años continúa intentando bailar y cantar al mismo tiempo. Si bien ya no es ese que estrenó los micrófonos que gracias a él se conocen como "Chayanne" y hoy utilizó uno inalámbrico y no saltó tanto como en los 90's, deleitó con su coordinación, sexys coreografías, movimientos pélvicos y de hombros.
Así tras una hora y 40 minutos de show que incluyó cinco cambios de ropa, el relato de la anécdota de cuando su misma espontaneidad lo dejó sin saber cómo bajarse de un poste de iluminación en en un show en el Festival de Viña del Mar y con reiterados guiños demostrando lo bien que conoce Chile, Elmer Figueroa (su nombre real), concretó un espectáculo más que redondo, dándoles a ellas todo lo que necesitaban: una coreografía sensual, en todas sus canciones y con excelentes bailarines, constantes coqueteos y saludos. Una vez más Chayanne hizo lo suyo y así prometió volver a hacer para las más de 72 mil personas que ya tienen su ticket para verlo en Santiago.
